Desde el jueves pasado, el gremio de Obras Sanitarias de Rosario y el sur de la provincia de Santa Fe comenzó una huelga por tiempo indeterminado a raíz del rechazo de la empresa Aguas Santafesinas S.A. de reincorporar a los 20 empleados despedidos y mejorar las condiciones laborales.

Cinco días más tarde, el conflicto lejos de mejorar recrudeció, y desde el sindicato, a través de su secretario general, Oscar Barrionuevo, recordaron que el cesanteo de los distintos operarios es “injustificado” y ocurrió “durante el período del actual presidente Sebastián Bonet”, sobre quien consideró que le “parece un deleite echar gente”.

Dentro del reclamo, además de la reincorporación de los 20 operarios despedidos, también se encuentran “abusos de situaciones oscuras del presidente de la empresa”.

“Nos llenaron de empresas contratistas que casi siempre no pagan sino y contratan personal con contratos basura”, agregó Barrionuevo. Dentro de esas denuncias se encuentra la tercerización de tareas, precarización laboral y abusos de poder de la actual conducción de la empresa

Por lo pronto, Barrionuevo indicó que no ha habido pedido formal de reunión por parte de la empresa: «Lo que llevamos adelante es una huelga y es por tiempo indeterminado».