En medio del conflicto que sostienen los trabajadores bancarios en el Banco Provincia de Buenos Aires por la reforma previsional que les sube la edad jubilatoria y les baja las jubilaciones, en los pasillos de la entidad han aparecido denuncias sobre el aumento desmedido de asesores del directorio, encabezado por Juan Curutchet.
Los listados señalan que el nuevo “personal” se encuentra cobrando diferentes sumas (algunas de ellas extraordinarias), pero sin contraprestación que se conozca de la mayoría.
Los números denunciados alcanzarían casi a 200 asesores, figurando entre ellos ex miembros del directorio de Scioli-Marangoni, un ex rugbier, Jorge Allen quien según la información que trascendió estaría cobrando más de $ 230.000 mensuales o personajes conocidos como Mendilaharzu, abogado de Alejandro Burzaco, ligado al escándalo Fifa (hermano de Eugenio Burzaco, secretario de Seguridad), quien estaría cobrando unos $ 121.000 mensuales.
“Contrataciones irregulares”
Consultado sobre estos casos, Santiago Etchemendi, secretario general de la Comisión Gremial Interna del Bapro, seccional Buenos Aires, expresó que “hemos verificado los casos denunciados, muchos se pueden corroborar en la página web del Banco”. Pero aclaró: “No obstante, consideramos que son contrataciones irregulares, ya que no se conoce la contraprestación que estas personas brindan a la institución, que además no han efectuado carrera bancaria alguna ni trayectoria en el sector financiero y productivo o tienen a su vez otras actividades que impedirían realizar ambas a la vez”.
Para Etchemendi, “en criollo, son ñoquis políticos”. Y marcó clara la diferencia: “Los trabajadores tenemos expresamente prohibido tener dos trabajos a la vez.”
“Ñoquis”
Etchemendi brindó ejemplos sobre esta situación al señalar que “hemos encontrado casos como el de Maria Gisela Candarle, quien tiene firmado un contrato por $ 676.000 anuales. Acá no la vimos nunca trabajando y debe ser porque a su vez es secretaria de Coordinación de Políticas Judiciales del Consejo de la Magistratura de CABA”.
Para el gemialista, “otro caso muy clarito, no por el monto mensual que cobrara, sino porque se trata de un concejal, es el de Diego Ezequiel Castagnaro, concejal por el PRO en Escobar, kinesiólogo (¿asesor de un banco?), quien tuvo contrato hasta fin de año”.
También le cayó a la gobernadora María Eugenia Vidal al advertir que “hay cientos de casos y queda claro que la austeridad anunciada por Vidal es sólo para los trabajadores, pero no para la ´casta política´ y los amigos del poder. Y que en el Banco Provincia nada cambió con el escándalo de Jorge Triaca. Siguen dilapidando los fondos públicos con sobresueldos y nombramientos de militantes sin idoneidad”, disparó Etchemendi.
“Muchos de estos casos son una práctica detestable ya que se trata de tener influencias políticas o pagar empleados propios (secretarios/as, abogados/as, etc.) con los fondos del Banco”, concluyó.
