Hasta el momento, y por lo que vienen siendo las últimas cifras, se puede establecer que el pico de coronavirus este año en Rosario se ha dado entre los meses de septiembre y octubre, con una gran cantidad de casos diarios y habiendo llegado a estar al borde del colapso de camas críticas.

Tanto en esas fechas cruciales como antes y después, resultó clave tanto el trabajo de los empleados sanitarios como de parte de las autoridades del rubro en los sectores público y privado, que lograron atender a la gente y hacer que el sistema no colapse.

Es por eso que desde la Asociación de Trabajadores de la Sanidad de Rosario y el sur provincial (Atsa Rosario) quisieron “realmente a todo el personal de salud médico y no médico que han trabajado arduamente en la primera línea de batalla de un virus desconocido”.

Además, el gremio de trabajadores del personal no médico de sanatorios privados (que nuclea a enfermeros, camilleros y personal cocina, entre otros) han destacado la disminución de casos de Covid-19, lo que genera una “relajación” en la saturación del sector privado.

“Hoy los trabajadores están afortunadamente menos estresados que semanas atrás donde la situación estuve muy preocupante”, dijo Marcelo Liparelli, secretario general de Atsa Rosario.

El mencionado pico, por lo pronto, se dio principalmente en la primera semana de octubre, cuando solamente en la ciudad los contagios llegaron a a cerca de 1400 en una jornada con 49 muertes.

Por ese entonces, el mismo secretario de salud del municipio local señalaba que el sistema de salud estaba al borde del colapso, algo que afortunadamente no sucedió. Hoy, la cifra diaria trepa a cerca de 400 contagios y por mirada de especialistas, puede ir en baja, con el aliciente de entrar en temporada estival.

Según destacó Liparelli, el tablero de situación “mostró niveles de mejoría esta ultima semana” y “el plantel de trabajadores está estable”. Por lo pronto, y acuerdo a lo publicado recientemente por la Asociación de Clínicas, Sanatorios y Hospitales Privados de Rosario, la ocupación de camas de adultos en caso de camas críticas y salas de internación general “ha disminuido notablemente”.

Con respecto a la llegada de una vacuna a la Argentina, el dirigente gremial apuntó que “debemos ser muy precavidos con este tema” ya que “aún se encuentran en etapa de análisis todas de ellas”.

“Ahora cuando sean certificadas por los distintos institutos que nos den fe de su efectividad y seguridad será una excelente noticia sin importar su origen, si es rusa, china o donde sea”, aseguró.

Finalmente, volvió a resaltar que el sistema salud de Rosario “demostró eficiencia”y que desde el punto de vista de los salarios han “podido cerrar las paritarias de este año, y salvo cuestiones puntuales se pudo contrarrestar en lo que fue un año duro para todos”.