La empresa Kimberly-Clark anunció el cierre de su planta de papel en Bernal, provincia de Buenos Aires. La decisión se da en un marco de «reestructuración global» de su modelo de negocios, e implicó 209 despidos.

En esta planta, la compañía fabricaba servilletas, papel higiénico, papel para pañales, rollos de cocina y papel para productos faciales, entre otros.

Más allá de bajar las persianas de su establecimiento en Bernal, la compañía mantendrá su presencia en la Argentina. Kimberly-Clark también tiene una planta en Pilar, dedicada principalmente al desarrollo de productos de protección femenina y para adultos, y otra en el parque industrial de la provincia de San Luis, cuyo foco es la producción de pañales para niños y adultos.

Entre las marcas que la compañía de origen estadounidense produce y comercializa en el país se encuentran los pañales Huggies, la línea de toallas femeninas y tampones Kotex, el papel higénico Scott, los pañuelitos Kleenex y los pañales Plenitud.

El cierre de la planta papelera se da en un contexto de caída de la actividad industrial y contracción del consumo. Según los últimos datos del Indec, las ventas en supermercados cayeron un 12,8% interanual en el acumulado de los primeros siete meses del año, mientras que el sector manufacturero registra una caída interanual del 7,6% en el año, de acuerdo con estimaciones de la Unión Industrial Argentina (UIA).

«Con una trayectoría de más de 25 años en el país, Kimberly-Clark se compromete a seguir invirtiendo en la Argentina, un mercado clave para la compañía», afirmaron desde la empresa en un comunicado. A su vez, indicaron que la Argentina es la casa matriz para el Cono Sur, que cuentan con más de 1000 empleados y que exportan a cuatro países de la región.

La planta industrial de San Luis en particular es una de las tres más grandes de dicha provincia y es la segunda en niveles de producción de la región.