La Asociación Obrera Minera Argentina (AOMA) y la empresa cementera Loma Negra acordaron en el Ministerio de Trabajo la inmediata reanudación de las tareas en la planta de la ciudad bonaerense de Olavarría, aunque el titular del sindicato, Héctor Laplace, aseguró que la compañía tiene «un indudable problema con el gremio».

Los trabajadores, en especial los de la firma Minerar, estaban en conflicto desde el martes de la semana anterior en rechazo de «las pésimas condiciones laborales».

Laplace señaló a la prensa que en esa planta patronal no existió nunca «un problema intersindical», y detalló que en 2020 se vivió «un conflicto prolongado con Minerar -que explota la cantera que provee de caliza a Loma Negra- porque procuró aplicar la convención colectiva 36/89 en lugar de la 58/89, que contempla la tarea del cemento».

«A ese extenso conflicto se sumaron los problemas propios de la pandemia de coronavirus. Recién el martes último se acordaron cinco puntos con Minerar, pero al final dio marcha atrás con uno y eso generó acciones directas. Hubo desalojos y acciones penales innecesarias», dijo Laplace sobre el conflicto en la planta de Olavarría.

Luego, Loma Negra informó que había decidido apagar los hornos de la planta L’Amalí y que dejaría de producir clinker, un insumo necesario para hacer cemento, y lo atribuyó al conflicto sindical, a lo que sumó la amenaza de un posible desabastecimiento, afirmó.

«Hubo mucho globo de humo con eso del supuesto desabastecimiento de cemento en el país. Loma Negra tiene el 45 por ciento del producto, pero hubo problemas en una sola fábrica. Además, en Olavarría hay un stock que asegura tres semanas de producción y despacho», señaló el dirigente, quien desestimó las denuncias contra los trabajadores.

El sindicalista sostuvo que esas denuncias por supuesta usurpación de la planta «serán desestimadas», y detalló que en diciembre último Loma Negra otorgó un doble aguinaldo a quienes cumplían tareas en el yacimiento y castigó al personal de más edad para dividir a los trabajadores y limitar «el poder o la representación que tienen los sindicatos».

Finalmente, el acuerdo entre el gremio y la empresa se centró en la situación laboral de los trabajadores de Minerar, quienes realizan tareas en las canteras de Loma Negra.

«Hay un problema indudable de la empresa con la organización sindical. El tema principal de la firma era el refrigerio. El acuerdo contempló que el premio por producción pase de 2 mil a 5.700 pesos, y que el presentismo sea ahora escalonado», explicó.