Los representantes de los gobiernos, empresarios y sindicatos, que forman parte de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) -Argentina incluida- aprobaron en junio pasado, luego de dos años de deliberaciones, el Convenio 190 sobre la Recomendación sobre violencia y acoso en el mundo del trabajo.
A raíz de esto, las mujeres gremialistas de Rosario se congregaron este miércoles en el Sindicato de Empleados Municipales para aunar sus pedidos de adhesión al gobierno nacional para que este impulse la legislación acorde para la defensa de los trabajadores ante estas problemáticas.
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La secretaria adjunta del sindicato anfitrión, Yamile Baclini, habló con Conclusión y manifestó que “hoy nos encontramos que estos temas los podemos abordar no sólo conjuntamente sino darles un rango constitucional a partir de este convenio donde se trata la violencia y el acoso en el ámbito laboral”.
“Es una normativa que necesitamos que forme parte dentro de nuestro rango constitucional porque abordaría a todos los trabajadores del país, sean del sector público o privado. Con una incorporación muy importante que tiene que ver con que hoy todavía no hay una regulación única y además tiene la característica específica de que la violencia y el acoso laboral atentan directamente contra los derechos humanos”, agregó.
Entre las ventajas Baclini mencionó que “a partir de allí se podría trabajar de otra manera, el Estado podría preveer sanciones y las personas empleadas necesitan de un Estado presente, por eso los sindicatos pedimos este convenio, para dejar de tener legislaciones indivudales y aisladas”.
Por su parte Silvana Cadahia, secretaria de Cultura y Derechos Humanos de Sadop dijo a este medio que “es muy importante porque por primera vez un organismo internacional reconoce a la violencia como la causante de las afecciones de la salud de los trabajadores, viene a dar cuenta de una situación que estamos padeciendo y que está invisibilizada y más en un contexto de quita de derechos como tenemos actualmente”.
Durante la reunión se abordó también el tema sobre la reforma de la Ley de ART. Al respecto, Fernanda Boriotti de Siprus dijo que “en general toda la ley de ART va en contra de los derechos de los trabajadores. La obligatoriedad de las comisiones médicas es uno de los puntos que objetamos, pedimos que puedan ser optativas”, ejemplificó.
“Si uno analiza, no es casual que en la reunión que hubo en Ginebra hayan sido todos los empleadores de América Latina quienes se abstuvieran de votar a favor de este convenio”, disparó.
