Reclamo histórico. Después de años de insistir, finalmente llegó el día. Este viernes se presentó en la Termina de Ómnibus Mariano Moreno un proyecto de ordenanza que propone la formalización de los maleteros que trabajan desde hace décadas en el lugar.

José Luis Donato, presidente de la cooperativa de maleteros se mostró orgulloso por lo conseguido: “Estamos muy contentos porque hace más de 50 años que se está trabajando irregularmente, a través de la propina, sin tener un salario, una obra social. Hace muchos años que trabajo acá y he visto muchos compañeros que no han podido tener nunca nada porque las autoridades nunca han atendido nuestros reclamos”.

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Y recopilando lo que han sido incansables años de lucha, contó que todo comenzó con la organización como cooperativa para después, a partir de allí, presentar un proyecto de ordenanza que busca regularizar la situación de los maleteros y que “no solo implica un salario, un seguro, una jubilación sino también la posibilidad de profesionalizar la formación de los maleteros, donde vamos a hacer cursos de idioma, de trata, de género”.

“Tratamos de dar un servicio a la ciudad, porque si queremos ser una ciudad grande, nosotros que somos los primeros en recibir a los pasajeros y extranjeros, tenemos que dar el ejemplo para que la ciudad esté bien representada”, señaló convencido y amplió: “La idea es establecer un registro municipal de maleteros para poder estar identificados, tener un uniforme”.

Sin vueltas, Donato consideró que “es momento de que los políticos decidan, porque es una decisión política, no pasa por lo económico. Lo único que pedimos es el derecho de uso de plataforma donde pagan todos los colectivos que entran a la terminal. En este momento el valor es de 230 pesos, queremos que ese dinero sea una contraprestación hacia el maletero donde podamos tener un salario mínimo, una ART, una obra social”.

Actualmente la cooperativa de maleteros funciona en una casa, pero pedirán al Estado municipal que les de un lugar apropiado. “Pienso que en el corto tiempo tendremos un espacio porque vemos que quieren mejorar esta situación, que hay buena predisposición”, apuntó confiado y a modo de cierre señaló: “Estamos muy entusiasmados porque queremos ser dignos, ya que durante muchos años no fuimos dignos de nada, solo tuvimos el desprecio de los políticos”.

Por su parte, el concejal Eduardo Toniolli, uno de los impulsores de la normativa dijo que se trata de un “reclamo histórico” que lleva más de 70 años, donde los maleteros trabajan dependiendo de la limosna de los pasajeros.

“El proyecto plantea la creación de un registro de maleteros de la terminal, la posibilidad de la firma de un convenio de esta cooperativa con el Estado municipal para ser sujetos de capacitaciones en formaciones en trata, violencia de género, primeros auxilios, turismo local y regional, idiomas, es decir, todo aquello que pueda servir para un ámbito como este que es la puerta de entrada a la ciudad”, explicó el edil justicialista.

Y en seguida completó: “El tercer aspecto del proyecto, el corazón de la iniciativa, es la posibilidad de que un porcentaje de lo que ingresa a esta terminal en concepto de derecho de plataforma, que es lo que pagan las empresas para poder usar las plataformas, pueda sostener este convenio. Es decir que los maleteros puedan tener un ingreso mínimo, más allá de la propina. Que la propina sea un complemento y les de algún grado de estabilidad”.

Por último consideró que “la pandemia desnudó este tipo de situaciones donde quienes no tienen un trabajo en relación de dependencia necesariamente tuvieron que salir a buscar alternativas. Se trata de entrar en un camino de formalización y reconocimiento de derechos”.

Actualmente son 68 maleteros los que hoy día trabajan en la Terminal de Ómnibus Mariano Moreno.