Una intensa jornada de lucha se desarrolló ayer, en el edificio de cortada Ricardone 1345, en donde mediante una asamblea se determinó realizar un paro de 48 horas para el 7 y 8 de marzo.

Las voces de la asamblea expresaron de manera conjunta la bronca e indignación por los salarios y condiciones precarias, en donde la hora de servicio no llega a 200 pesos y que además no han cobrado el correspondiente a este mes.

En este contexto, es nesario remarcar la importancia de este sector, que dedica sus días a las niñeces y adolesencias, pilares fundamentales para construir una sociedad más justa y equitativa, en donde todos y todas tengan las mismas oportunidades.

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La jornada de lucha tuvo su anclaje, en reclamar el pago de salarios adeudados a alrededor de 120 trabajadores, quienes además sufren innumerables recortes y continúan cobrando $169 por hora de servicio. En la asamblea compartieron las experiencias que viven frente a la paradoja de trabajar, como ellos mismos expresaron “con parte de la población más vulnerable y la precarización impuesta por el estado mismo”.

Las mujeres que asistieron a la asamblea, que en muchos casos son además sostén de familia, expresaron con indignación que van a continuar la lucha contra la precarización. Durante la jornada, se escuchó la frase de una trabajadora, que quedó resonando en todos los presentes: “estoy cansada de cagarme de hambre”.

En asamblea se decidió finalmente llevar adelante una jornada de visibilización el día 7 de marzo y participar activamente del paro del 8 (Día Internacional de la Mujer trabajadora). “Necesitamos que las voces de las trabajadoras de niñez se escuchen. Porque la precarización es muy grande, estamos cansadas porque hay hambre, porque no nos alcanza para el alquiler de nuestros hogares, porque necesitamos ser escuchadas”, explicó Palacios.

Desde la Junta Interna ATE Niñez advirtieron que continuarán con asambleas para sostener un plan de lucha que de fin a la precariedad que impone la Dirección.