Por Hermes Lavallén

El Alteros Buoyant Airborne (mejor conocido como BAT) es un anillo inflado con helio que tiene una turbina colgada en su interior para capturar vientos, una turbina eólica aerotransportada que flota a más de 300 metros de altura.

Altaeros Energies, con sede en Cambridge, Massachusetts se llama la startup formada por ex alumnos del MIT que han desarrollado BAT “la primera turbina eólica aerotransportada comercial del mundo”.  Utiliza una carcasa llena de helio para flotar alto como un rascacielos y capturar los vientos más fuertes y constantes; disponibles a esa altitud.  Puede producir el doble de energía que las turbinas montadas en torres de tamaño similar, el sistema, llamado Turbina de aire flotante, ahora se está preparando para su implementación comercial en las zonas rurales de Alaska.

La turbina eólica flotante inflable (llena de helio),  se puede instalar en un día. Alberga un aerogenerador ligero que puede proporcionar suficiente energía para 15 hogares, puede mantener un pequeño pueblo en otras áreas enviando la electricidad que crea de vuelta a la tierra a través de su cable de alimentación conectado.

Podría usarse para electricidad de emergencia en zonas de desastre o para ayudar a comunidades distantes a nivel mundial que tengan poca perspectiva de estar conectas. A diferencia de las turbinas eólicas terrestres,  bat “el murciélago” puede hacer uso de las velocidades del viento más rápidas que normalmente se encuentra a unos 600 metros de altura.

Ben Glass, CEO de la compañía creadora, dijo que con el BAT esperan proveer energía a la mitad del precio de la energía en Alaska.

El objetivo del artefacto no es sustituir la totalidad de las fuentes de energía de las ciudades, sino servir en lugares remotos donde sea difícil conseguir energía. «El BAT puede ser transportado e instalado sin la necesidad de grúas, torres o cimientos que han obstaculizado proyectos eólicos en el pasado», afirma Glass.

Una de las ventajas adicionales de este sistema es que puede cargar con equipo de comunicaciones como transceptores de celular, equipo meteorológico y demás, ya que estos no afectan el funcionamiento de la turbina.

El BAT se encuentra sujeto a una estación por medio de amarres de gran grosor que además permiten a la electricidad bajar hasta el suelo. El prototipo ha sido probado en vientos de hasta 70 kilómetros por hora, aunque sus diseñadores creen que podría resistir más, ya que se realizó con materiales usados para dirigibles industriales.

El proyecto para probar la turbina fue financiado por el Alaska Energy Authority Emerging Energy Technology, cuyo dueño el magnate de los negocios  Ratan Tata que también posee Tata Power, la empresa de energía más grande de la India.

A pesar de su eficiencia, el BAT no está diseñado para reemplazar las turbinas montadas en torres convencionales. En cambio, su propósito es llevar la energía eólica a áreas remotas fuera de la red donde las torres no son factibles en la práctica o económicamente.

La construcción de turbinas convencionales, por ejemplo, requiere toneladas de concreto y el uso de grúas, que pueden ser difíciles de maniobrar en ciertos sitios. El BAT modular, se empaqueta en dos contenedores de envío de tamaño mediano para el transporte «y puede simplemente inflarse y levantarse en el aire para su instalación».

«La energía se transmite al suelo mediante un cable conductor, similar a los que se utilizan para alimentar los sistemas de radar elevados por globos atados llamados aerostatos».

Debido a que no necesita toda la parafernalia de una turbina estándar, como una torre, una base de concreto, entrega y conexión permanente a la red, el Altaeros BAT podría establecerse rápidamente cerca de los sitios de desastre en áreas remotas y proporcionar energía, respaldo fuera de la red para dispositivos móviles. Estaciones bases telefónicas y servicios de rescate campamentos temporales y bases militares.