Todas las semanas se emite por Conclusión un ciclo que buscará acercar la realidad, para poder intepelarla profundamente. Es por ello que Catalejo a lo largo de treinta minutos, abordará diversos temas ligados a la actualidad, cultura, salud, política, opinión e investigación, tratando de amplificar en todos los casos, un imprescindible debate.

En esta emisión contamos con el imprescindible aporte de Rubén Farías, consejero y operador en salud mental y adicciones. Un intercambio que contó con la experiencia que otorga la palabra de quién ha transitado por el oscuro túnel de una de las problemáticas más espinosas que una persona puede atravesar.

El rol del estado, el prejuicio social y el raquítico enfoque de los medios de comunicación, como ariete de una charla que buscó acercar las respuestas a una serie de preguntas. ¿Cuándo vemos a las personas con problemas de adicción? ¿Cuándo sus actos tienen implicancia o efecto en la sociedad? ¿Da lo mismo ser un adicto pobre o rico? ¿Por qué se condena al adicto cuando delinque y no es tomado como un paciente enfermo? ¿Le importa a la sociedad ese adicto que no delinque y conserva una “vida estable”?

“Es una problemática de salud, no es un problema de voluntad o actitud, sino que es una enfermedad compulsiva, el adicto no decide consumir, no puede hacer otra cosa sino entra en tratamiento. Nos enteramos de los adictos, aún aquellos que trabajamos en la salud y la temática de la adicción, cuando el adicto ya tiene desarrollada la enfermedad”, enfatizó Rubén Farias.