Todas las semanas se emite por el canal de Youtube de Conclusión un ciclo que buscará acercar la realidad, para poder interpelarla profundamente. Es por ello que Catalejo, a lo largo de treinta minutos, abordará diversos temas ligados a la actualidad, cultura, salud, política, opinión e investigación, tratando de amplificar en todos los casos, un imprescindible debate.

En esta oportunidad Gisela Gentile y Alejandro Maidana dialogaron con Myriam Gamarra y Rubén Benítez, integrantes del Frente de Organizaciones en Lucha (FOL) para conocer el gran trabajo que realizan en distintos barrios con la única finalidad de consolidar un trabajo genuino que pueda ayudar a dejar atrás la espinosa situación económica que atraviesan los sectores populares.

 

En los últimos días, el avance mediático y discursivo contra las organizaciones sociales, volvió a estar en el ojo de la tormenta de un país rico, pero deshumanizantemente desigual. El ataque al sentido común de las mayorías, ha encontrado terreno fértil en la idea de que aquellos que reciben algún tipo de ayuda social no trabajan, y hacen las veces de yunque para las aspiraciones de una Argentina que busca salir del pozo socioeconómico en la que se encuentra sumida.

La realidad, es que detrás de los movimientos sociales, existe un trabajo muy poco visibilizado y difundido, un estoico camino cooperativista de apoyo mutuo. Esta es la manera que han encontrado para poder contestarle a un sistema que excluye, estigmatiza y reproduce el discurso de la elite dominante que ha encontrado eco en una parte de la sociedad que, en lugar de informarse, se abraza a la comodidad que genera la criminalización de la pobreza, un verdadero chivo expiatorio.

El Frente de Organizaciones en Lucha, es una organización social que trabaja arduamente para autoorganizar a las familias precarizadas más humildes y postergadas de la clase trabajadora de nuestro país, al calor de las luchas constantes por reivindicar derechos, por mejorar y transformar, aquí y ahora, las condiciones materiales, sociales, y culturales de vida.

El objetico es muy claro, luchar por trabajo con todos los derechos, con sueldos dignos y dignas condiciones laborales, por igualdad de géneros y la liberación de las mujeres y disidencias, por salud, educación, vivienda y hábitat adecuados, por el derecho de los pueblos originarios, de la niñez y la juventud, por la defensas de los derechos humanos y por acceso a la cultura y al esparcimiento.