Diluvio y desolación. Hace diez días que un temporal no da respiro a la provincia de Córdoba. En el Valle de Punilla y las Sierras Chicas, las lluvias dejaron nueve muertos y centenares de evacuados. Hoy, la principal preocupación está en la zona noreste de la provincia, ya que desde la madrugada del martes las precipitaciones no cesan y se registraron 358 milímetros de agua caída dejando 600 evacuados.
Los departamentos de San Justo y Río Primero fueron los más golpeados anteanoche por el agua, y las precipitaciones oscilaron en los 300 milímetros.
Según el portal cordobés La Voz, el ministro de Desarrollo Social de la Provincia, Daniel Passerini, confirmó este jueves que hay más de 600 evacuados «con gran cantidad en La Tordilla, Balnearia, en Idiazábal, en Tránsito, en Cosquín y en Santa María de Punilla”.
«En Idiazábal, los evacuados fueron llevados a Leones. En Río Primero, en Piquillín y Pedro Vivas hay gente evacuada, y la dificultad de tránsito ha hecho muy lenta la llegada de la asistencia», explicó el funcionario.
En todas las zonas afectadas hay numerosas zonas anegadas y familias evacuadas.
Passerini dispuso de envíos de ayudas solidarias a las localidades de La Tordilla, Balnearia, Monte Cristo, Santa Rosa de Río Primero, Idiazábal, Cosquín y Bell Ville. A su vez, proporcionó refuerzos en personal policial, defensa civil y bomberos.
El parte oficial detalló que todos los diques se encuentran en su máximo nivel, habiéndose abierto las válvulas del dique San Roque (Villa Carlos Paz), lo que ha acrecentado el caudal del río Suquía, que no reviste gravedad. El resto de los diques siguen manteniendo su situación anterior.
En el valle de Traslasierra, Punilla y Calamuchita no se registraron precipitaciones de consideración; en el Valle de Punilla, hay inundaciones en la ciudad de Cosquín y Santa María de Punilla.
Además hay tres ríos que registran crecidas de importancia: San Antonio, Cosquín y el arroyo Los Chorrillos.
El Comité de Crisis, que se encuentra en estado de reunión permanente, ofrecerá un informe en horas de la mañana para actualizar la situación general sobre los daños y la logística de recuperación y asistencia a las más de 1.700 familias afectadas, particularmente en localidades de los departamentos Río Primero y San Justo.
La preocupación sigue y persiste el alerta meteorológico por probables tormentas fuertes, con precipitaciones para el noreste de la provincia.
Además del centenar de evacuados en varias localidades, se encuentran interrumpidos los servicios de electricidad, agua y comunicaciones.
Desde la Policía Caminera se alertó sobre la necesidad de transitar con precaución en las rutas del interior provincial, debido a que en varios tramos las cintas asfálticas se encuentran bajo agua y algunos puentes interrumpidos.
En las localidades de Marull, Villa Santa Rosa de Río Primero y San Francisco, el panorama parece estar más tranquilo y las lluvias comenzaron a cesar.
En Marull se mantiene el corte en el puente que cruza el río Xanaes por acumulación de agua entre las rutas 19 y 17 y se cayó un paso ferroviario que cruza el Suquía.
Mientras, en Villa Santa Rosa de Río Primero se mantienen en alerta por como aumentó el caudal del río Suquía producto de la apertura de las válvulas del dique San Roque.
Por otro lado, la situación mejoró notablemente en San Francisco, ya que anoche se podía circular sin dificultades por la ciudad después que varias de las calles estuvieran anegadas.
Sigue la búsqueda de Ailén
Equipos especializados en rescate y salvamento retomaron esta mañana la búsqueda de Ailén Villacorta, la chica de 14 años que en la tarde de ayer fue arrastrada por la crecida de un río en la localidad cordobesa de La Calera, en tanto aún permanecen evacuadas unas 600 personas en distintas localidades de la provincia como consecuencia del fuerte temporal registrado ayer.
De acuerdo a los datos suministrados desde la Dirección de Defensa Civil de la provincia, en las primeras horas de esta mañana se reinició el rastrillaje en la zona del dique Mal Paso, lugar donde desapareció la adolescente cuando se bañaba con un amigo de su misma edad y fue arrastrada por la crecida de la cuenca del río Primero.
