La pesca ilegal en mares argentinos no es un tema nuevo y es verdaderamente preocupante. En ese sentido, un Comando Conjunto Marítimo planea tareas de control y vigilancia ante la presencia de 431 barcos pesqueros extranjeros en aguas del Atlántico Sur. Del total de esas embarcaciones, el 80% pertenece a China. En ese sentido, la Argentina intenta poner freno a la pesca furtiva para que no traspase el límite de la milla 201, donde ya comienza el Mar Argentino.

El Comando Conjunto Marítimo en vigilancia las 24 horas

El Ministerio de Defensa decidió crear el Comando Conjunto Marítimo con el fin de reforzar el control y la vigilancia en aguas territoriales nacionales, previendo la pesca ilegal. Dicho Comando se encuentra en actividad de vigilancia las 24 horas del día y cuenta con renovada tecnología para llevarla a cabo.

El mismo opera en la jurisdicción del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, que estuvo dedicando esfuerzos en los últimos meses para planificar mejor sus operaciones. A partir de allí se pudo constatar la presencia de estos 431 barcos extranjeros en la milla 201, a la altura de Comodoro Rivadavia.

La ubicación de estas embarcaciones extranjeras está a apenas un paso de distancia de la Zona Económica Exclusiva de la Argentina, donde el país ejerce derechos soberanos.

La tentativa de pesca ilegal, un verdadero problema

La ubicación de de estos barcos pesqueros en el límite de la milla 201 no implica de por sí un problema, siempre y cuando no intenten traspasarla y realizar tareas de pesca en aguas territoriales argentinas, algo que se ha dado en reiteradas oportunidades.

Si estos buques, de los cuales 417 son pesqueros y el resto de logística que les proveen de combustible, no atraviesan ese límite, el conflicto no se presentaría.

Durante los meses de diciembre a marzo es habitual ver la presencia de barcos extranjeros en las cercanías a la milla 201 en el Atlántico Sur, que es un lugar privilegiado por la cantidad y variedad de peces.

“Se percibe, de esta manera, un movimiento migratorio cíclico de las flotas pesqueras extranjeras”, explicó  Pablo Varela, comandante del Comando Conjunto Marítimo.

Asimismo, durante los meses de marzo a mayo, estas embarcaciones suelen trasladarse a la zona norte de las Islas Malvinas, que resultan favorecidos por los permisos de pesca que confiere el gobierno de las islas.

“El control de la pesca en la milla 201 no es la única tarea del Comando Conjunto Marítimo. La vigilancia estratégica permite detectar anomalías que afectan intereses nacionales en los espacios marítimos y fluviales y brinda la alerta estratégica necesaria ante una eventual amenaza”, detalló el comodoro Varela.