Una deuda de antigua data es la que mantiene Municipalidad de Firmat con los habitantes de esa ciudad ubicada a unos 110 kilómetros de Rosario en el Departamento de General López, en la provincia de Santa Fe. Se trata de la colocación de un ascensor en el edificio en donde en la planta alta funciona el Concejo Municipal, como también el Juzgado Comunal o “de pequeñas causas” al que acude a diario mucha gente para realizar trámites.

A casi veinte años del pedido del cuerpo legislativo firmatense, la semana pasada durante la última sesión del Concejo el edil de Juntos, Nicolás Rufine, recordó la deuda que mantuvieron las distintas intendencias del Frente Progresista –que gobierna en esa ciudad desde 1999–, con respecto a la colocación del elevador. 

En diálogo con Conclusión, Rufine explicó que, si bien en 2003 no fue una ordenanza sino una minuta de comunicación, “la deuda con la sociedad existe desde hace casi veinte años” y recordó que en 2017 el pedido cobró fuerza de ordenanza.

“No obstante el Ejecutivo no destinó nunca en este tiempo dentro del Presupuesto la partida para la colocación del ascensor”, dijo.

Firmat es una ciudad que cuenta con unos 25 mil habitantes. El uso del elevador en el edificio municipal es una prioridad para muchos vecinos, ya sean adultos o niños que con capacidades motoras especiales que por la ausencia del elevador no pueden acceder, tanto a las sesiones y oficinas del Concejo, como a la repartición del Juzgado Comunal.

“Miguel  Lang Shamber era Luthier, diseñaba objetos, tenía 80 años y le faltaba una pierna. Fue declarado ciudadano distinguido en 2013 y nunca pudo subir al Concejo. También tenemos un escritor que está en silla motorizada y que tiene una presencia muy activa en el ámbito cultural y tampoco puede subir al Concejo”, agregó Rufine.

El edil explicó que en la planta alta del edificio está el Juzgado conocido como “de pequeñas causas” en donde se certifican firmas y se realizan distintos tipos de trámites civiles de la vida cotidiana.

“Si va una abuela viene con su andador, baja un funcionario con la mejor de las voluntades y se le hace el trámite en el hall de entrada, pero sigue siendo muy discriminativo si tenés una movilidad reducida, es como acentuar la diferencia”, agregó.

“Todos los años cuando el Ejecutivo sube el Presupuesto al Concejo para el año siguiente, ya hace mucho que le pedimos que por favor destinen el dinero para la colocación del ascensor”, señaló.

La semana pasada, el bloque Juntos que integra Rufine reiteró el pedido a través de una minuta de comunicación: “Le volvemos a pedir al Intendente que ejecute este ascensor en el edificio municipal. En 2003, cuando se hizo el primer pedido yo todavía estaba en la escuela secundaria”, indicó Rufine.

Y concluyó: “Observamos a muchos vecinos con dificultades para subir y recordamos la necesidad de esta herramienta de accesibilidad”, dijo al pedir la efectivización de la ordenanza aprobada en 2017.