La senadora nacional por la provincia de Buenos Aires, Juliana di Tullio (FdT), presentó un proyecto de ley para la creación de lo que denominó Programa Escudo, a través del cual las escuelas públicas de todo el país podrán contar con provisión de repelente de insectos y protectores solares de forma gratuita, se informó oficialmente.

«El avance de enfermedades como el dengue, la fiebre chikungunya y el zika transmitidas por la picadura de mosquitos, y las conclusiones científicas que indican que el 80% de los daños causados por el sol ocurren antes de los 18 años, y que sus efectos son acumulativos e irreversibles a lo largo de toda la vida, nos obliga a tomar nuevas medidas de prevención con nuestros niños, niñas y adolescentes», señaló la legisladora.

«Los repelentes de insectos y los protectores solares se han convertido en elementos de primera necesidad, y facilitar que las escuelas tengan provisión de estos productos es fundamental: son el ámbito ideal para que nuestras infancias y juventudes incorporen buenos hábitos de cuidado», afirmó Di Tullio.

El proyecto presentado por la senadora bonaerense cubre a los alumnos y las alumnas de los tres niveles -inicial, primario y secundario- de las escuelas de gestión pública y de aquellos establecimientos de gestión privada que cuenten con 100% de subvención estatal y/o cuota cero.

Según el último reporte publicado por el Ministerio de Salud de la Nación, hasta el 23 de abril de 2023 se notificaron en el país 71.717 casos de dengue, de los cuales 65.195 adquirieron la infección en la Argentina, mientras que de fiebre chikungunya los casos ascendían a 1.460, de los cuales 910 adquirieron la infección en el país y otros 260 permanecían en estudio. Ambas enfermedades son transmitidas por la picadura de mosquitos Aedes infectados.

Con respecto a la exposición al sol, el Comité Nacional de Salud Infantil y Ambiente de la Sociedad Argentina de Pediatría advirtió que «las radiaciones ultravioletas (RUV) son la principal causa de cáncer de piel» y que «la cantidad de tumores malignos (melanomas) se ha duplicado en los últimos 40 años», por lo que, dado que el daño solar es acumulativo, «los niños y adolescentes son especialmente vulnerables y se encuentran particularmente en riesgo».