El ex presidente de Bolivia Evo Morales anunció en Buenos Aires que los juristas argentinos Eugenio Raúl Zaffaroni y Raúl Gustavo Ferreyra serán sus asesores legales, en causas judiciales ante cortes internacionales y bolivianas relativas a su derrocamiento y a los delitos que le imputa el gobierno de facto de su país.

Morales llegó como refugiado a Argentina el mes pasado tras una estancia en México luego de que la cúpula del Ejército boliviano forzara su renuncia en medio de protestas populares por presunto fraude en las elecciones presidenciales de octubre pasado, en las que el líder izquierdista fue proclamado ganador en primera vuelta.

A instancias del gobierno de facto que lo reemplazó, liderado por la presidenta Jeanine Áñez, la Fiscalía boliviana ha acusado a Morales de los delitos de sedición, terrorismo y financiamiento de terrorismo y ha emitido una orden de aprehensión en su contra.

La Fiscalía dice que Morales es responsable de promover violentos enfrentamientos poselectorales que dejaron 35 muertos y derivaron en su renuncia el 10 de noviembre, con base en un audio en el que supuestamente se escucha al ex gobernante ordenar resistir y hacer un cerco a las ciudades para derrocar a Áñez.

El primer presidente indígena de Bolivia, que estuvo en el poder durante 14 años, niega los cargos y califica el caso de un montaje de sus rivales de derecha, a los que acusa de haberlo derrocado mediante un golpe de Estado.

El gobierno interino de Áñez ha convocado a elecciones generales pero aún no ha puesto su fecha.

La Justicia boliviana ha autorizado la participación en los comicios del partido de Morales, el Movimiento al Socialismo (MAS), que definirá sus candidatos en un Congreso previsto inicialmente para este mes.