La población de Argentina, noveno país a nivel mundial con más casos del nuevo coronavirus, debe acostumbrarse a convivir con la pandemia y extremar cuidados hasta que aparezca una vacuna contra la enfermedad, afirmó el presidente de la Sociedad Argentina de Infectología (SADI), Omar Sued.

El experto hizo un balance de la situación en el país, que registró su primer caso de la enfermedad del nuevo coronavirus (COVID-19) el 3 de marzo pasado y que inició una cuarentena el 20 de ese mes, medida que regirá hasta el 11 de octubre próximo.

«Hay un vaso medio lleno y un vaso medio vacío, depende de cómo lo queramos ver. Inevitablemente, hay una parte fea que es la cantidad de fallecidos, que ha aumentado en forma muy importante en los últimos días, por el recuento de casos que estaban demorados en incorporarse al sistema de vigilancia. Es algo que nos asusta a todos», dijo Sued.

Argentina acumuló hasta este lunes 723.132 casos confirmados y 16.113 decesos, lo que supone una tasa de letalidad del 2,21 por ciento, según datos del Ministerio de Salud.

«Por otro lado vemos que la situación en nuestro país, gracias a medidas tempranas, ha sido mucho menos grave que en otros países de la región, sobre todo el hecho de tener una cuarentena larga», dijo Sued, quien integra el Comité de Expertos que asesora al presidente Alberto Fernández.

Sued subrayó que el aislamiento dio tiempo para «la reconstrucción del sistema sanitario, que viene desde los años 90 (del siglo pasado) en franco retroceso, con sistemas de vigilancia y camas de terapia intensiva».

El profesional aseveró que en la mayoría de las provincias argentinas se logró «que estos aumentos bruscos de casos no se acompañen de una gran mortalidad y una gran saturación del sistema».

«Creo que lo que se hizo bien fue el manejo político del gobierno nacional, el gran compromiso que hubo desde el comienzo y los intentos de tener un diálogo coordinado, sobre todo con los distritos más grandes, como la ciudad de Buenos Aires y la provincia de Buenos Aires, para tener una respuesta coordinada», subrayó.

La capital ha confirmado 123.288 casos, mientras que la provincia de Buenos Aires, la más poblada de Argentina, ha reportado 401.862 contagios, mientras ambos distritos representan el 73,82 por ciento del total de casos en el país.

El infectólogo puso como ejemplo que cuando «una ciudad que estaba sin casos de pronto aumentan estrepitosamente, en forma logarítmica, la única medida muy importante para llevar adelante ahí es el cierre estricto de la ciudad durante un par de semanas».

El especialista dijo que, sin embargo, «esas medidas no se han podido tomar en la mayoría de las provincias por falta de apoyo político y por falta de diálogo, que hay que intentar de reconstruir».

Destacó que la capacidad de realizar pruebas para detectar el virus se incrementó de 300 al inicio, hasta unas 25.000 diarias en la actualidad, aunque mencionó que «todos quisiéramos que sean muchas más, pero hay una realidad concreta del país».

El experto explicó que Argentina afronta «falta de recursos para financiar todo, junto con una falta de recursos humanos y de instalaciones de laboratorios. Se fue haciendo lo que se puede, con lo que se tiene».

«Indudablemente, si hubiera más recursos, más capacidad y fuerza humana para hacer el rastreo y el aislamiento de los casos, la búsqueda de los contactos, la situación sería un poco mejor», estimó.

Recalcó la importancia de «transmitir un mensaje a la gente, que esto ha llegado para quedarse varios meses, que esto nos obliga a cambios de conducta a todos. Nos afecta a todos, no es solamente un tema de una provincia o de Argentina, es un tema mundial».

«Es fundamental el rol de la gente, mantener esos dos metros de distancia en cada situación, evitar compartir botellas, los abrazos, los besos o estar sin barbijo (mascarilla). Tenemos que tratar de cuidarnos hasta que tengamos la vacuna», enfatizó Sued.

El presidente de la SADI comentó que «en los próximos meses vamos a tener información y vamos a tener novedades», con relación a las vacunas para la COVID-19.

«Aunque nos vamos a tener que acostumbrar a convivir de alguna manera varios meses más todavía con esta pandemia. Lo más importante, por ahora, es cuidarse», enfatizó.