Una fuerte tormenta de lluvia y granizó se abatió sobre la ciudad bonaerense de Pergamino, donde se produjeron roturas de techos y de vehículos y otros importantes daños materiales.

El temporal se produjo anoche, alrededor de las 20, e incluyó una granizada de 15 minutos sin interrupción, con piedras que en algunos casos eran similares en tamaño a una pelota de tenis, además de producirse una gran cantidad de caída de agua y ráfagas, informó el sitio del diario La Opinión de Pergamino.

La tormenta dejó un saldo de decenas de autos dañados, árboles caídos y techos de chapa destruidos, además de toldos, vidrieras y marquesinas.

Tras el intenso temporal, se taparon los desagües y varias calles de la localidad situada a unos 200 kilómetros al oeste de la ciudad de Buenos Aires quedaron convertidas en «ríos de hielo», según puede apreciarse en las numerosas imágenes que circularon en redes sociales.

Como consecuencia de la tormenta, se suspendieron este jueves las clases en trece establecimientos educativos, al menos en el turno mañana.