La agrupación Villa Constitución Sin Venenos (VCSV) abraza a vecinos autoconvocados que ante la posible instalación de un depósito de fertilizantes químicos a granel de enormes dimensiones, comenzaron a reunirse en distintas asambleas.

El mismo está ubicado en el casco urbano de la ciudad, a escasos metros de viviendas familiares, instituciones educativas, centros de salud y zonas de esparcimiento. Por dichas razones, el acopio de material agrotóxico representaría un enorme riesgo para la salud no sólo de los habitantes de las inmediaciones, sino también para la región.

Debido a la volatilidad de este tipo de productos y su cercanía con las aguas del río Paraná, es que la agrupación Villa Constitución Sin Venenos lucha por la no instalación de esta u otras industrias nocivas sanitaria y ambientalmente dentro del radio local.

PTP WARRANT (la empresa que adquirió la concesión de la Zona Franca por treinta años) es un emprendimiento subsidiario de PTP Group, y es quién solicita el estudio de impacto ambiental para que pueda operar Nitron en l ciudad de Villa Cosntitución. Nitron, por su parte, es una empresa estadounidense líder mundial en comercialización de químicos y fertilizantes, principalmente nitrógeno, potasio y fosfato. Esta empresa se encuentra anclada en Sudamérica desde 2008, convirtiéndose esta geografía en su principal base de operaciones de mercado, ya que abastece no solo a la Argentina, sino también a Brasil, Uruguay, Paraguay y Bolivia entre otros países latinoamericanos.

De instalarse, la idea primaria sería la de almacenar unas ciento sesenta mil toneladas de fertilizantes granulados, y otras sesenta mil de en estado líquido. Esto quiere decir que Villa Constitución podría transformarse en un polo químico, cosa que agravaría la situación ambiental y sanitaria, profundizando la contaminación del Paraná.

“Nos venimos organizando y luchando hace ya un año, tiempo que hasta el día de la fecha ha servido para que esta empresa no se instale. Las irregularidades que ostenta la misma son muchas, tan explícitas que cuesta creer que de esa manera la habiliten a operar”, cuenta Marcela, vecina del lugar e integrante de VCSV en charla con Conclusión.

La palabra de los profesionales de la salud son de vital importancia en este tipo de luchas, “no pueden seguir imponiéndose intereses económicos por sobre los que refieren a la salud de la población. Si bien la coyuntura del país atraviesa tiempos muy álgidos, los vecinos de este lugar han decidido participar activamente en el repudio a Nitron”, comentó Víctor, médico y referente de esta resistencia.

Bárbara es abogada, y la encargada de llevar adelante la pata legal en este conflicto, “cuando nosotros tomamos la causa, lo primero que hicimos fue pedir informes sobre la misma tanto al Municipio, Provincia, Ambiente y obviamente a Zona Franca. El ente de esta última nos dice que no hay nada, el municipio argumenta que había autorización para instalar un depósito de mercadería en general».

«Resultó ser que se estaba allanando el camino para el desembarco de Nitron. Las irregularidades son muchas, es imposible que un depósito con esas características pueda operar en un casco urbano en donde la casa más cercana se encuentra a 36 metros. Vamos a seguir insistiendo con una consulta popular vinculante urgente porque la vida de los pueblos no es un negocio”, enfatizó.

Por último fue Natalia, una vecina que activa en la agrupación desde el primer día la que brindó su posición: “Este modelo productivo es inviable desde el punto de vista de la salud y el ambiente. Debemos ponerle un freno, ya que la salud de la población no se negocia bajo ninguna promesa de puestos de trabajo a futuro. Este tipo de empresas suelen aprovechar este tipo de contextos económicos, para poder desembarcar ofreciendo una reactivación económica para el lugar. Estamos unidos como vecinos, y recibimos el apoyo de distintas agrupaciones y asambleas de todo el país”, concluyó.