El infectólogo Hugo Pizzi advirtió hoy que «se avecinan momentos desagradables» ante la presencia de la variante Ómicron, a la vez que apoyó la implementación del Pase Sanitario a partir del primero de enero para revertir la demora de unas diez mil personas en aplicarse la segunda vacuna detectada al hacer el llamado para la tercera dosis.

«Todo esto debería solucionarse con el Pase Sanitario», afirmó el especialista quien además consideró: «Hay que volver a todos los hábitos sanitarios que habíamos adquirido», como el uso de barbijos, el distanciamiento social y el lavado de manos, ante el aumento de contagios en el país y la nueva mutación del virus desde África, que llegó a San Luis y Córdoba, por dos viajeros desde Sudáfrica y Dubái, respectivamente.

Pizzi, en dialogo con Luis Majul en el programa Esta Mañana que conduce por Radio Rivadavia reivindicó los cuidados sanitarios y en ese contexto, destacó el rol que cumplen a las madres y las abuelas que «se han transformado en la guardia pretoriana de la pandemia».

«Ellas tienen la visión de cuidar a sus hijos sin importar la edad y recomendar los cuidados tanto sobre el distanciamiento, como la higiene de manos y el uso de tapabocas», indicó.

Además, informó que se detectaron «inconvenientes» cuando se colocó «la tercera dosis de Sinopharm», algo que se advirtió en todos los distritos.

Según explicó: «Nos encontramos con 10 mil personas que solo recibieron la primera dosis y nunca se aplicaron la segunda aun habiendo llamados».

«Creo que se avecinan momentos desagradables, la medida es una idea para ser más estrictos»

Así lo indicó Pizzi, sobre al anuncio sobre la implementación obligatoria del Pase Sanitario a partir del primero de enero próximo en todo el país para determinadas actividades, mientras que en la provincia de Buenos Aires se comenzará a pedir desde el 21 de diciembre.

Consultado sobre el primer muerto por la cepa Ómicron en Gran Bretaña, el infectólogo se refirió al nivel del contagio de la cepa, indicando que hasta ahora hay una recopilación sanitaria mundial donde se registra que de «casi 3000 casos» se detectó que «no hay ningún tipo de agresión al pulmón, a los nervios del olfato y del gusto, que se comporte como un estado gripal, fiebre, cansancio, que no necesita tratamiento, ni internación, siguiendo la evolución de la enfermedad en la casa. Pero aclaró, que «aún no hay información del fallecido si tenía alguna comorbilidad» por el que se haya agravado su cuadro y le causó la muerte.