Por Marcelo Campanella

Este 22 de julio el sol abandona el signo de Cáncer para entrar al signo de Leo hasta el 22 de agosto del presente año. Leo es un signo de fuego regido por el sol, denominado en la antigüedad Helios para los griegos y Apolo para los romanos.

En los horóscopos se lo relaciona con la casa 5, la casa de la creatividad, la expresión de la misma es la descendencia (hijos) y también los amores y/o amantes.

Sus nativos suelen ser de buena complexión física y abundante cabellera, aunque lampiños en su físico, como los leones que son el animal totémico que los representa. Rige el corazón.

Los nacidos bajo su regencia suelen tener cuadros de fiebre sin explicación alguna, solamente por ser inflamables como los hijos del sol. También suelen sufrir de dolencias en la zona de la espalda.

Se impone la generosidad y el ego, ya que sus regidos suelen ser expresivos y orgullosos y egocéntricos, con cierta arrogancia y gusto por todo lo llamativo. No les gusta que los manden, suelen ser algo rebeldes y autoritarios en su faz negativa.

Durante la regencia de Leo los signos más complicados son Tauro, Escorpio, y, por oposición, acuario. La frase que los identifica es “yo te quiero”.