Por Gisela Gentile

Llega el fin de año y es necesario hablar sobre cómo celebrar las fiestas; en un 2020 particularmente atípico, uno de los temas que está en boca de todos tiene que ver con los protocolos a seguir para prevenir contagios, sin dejar de lado las formas de los festejos.

Todos queremos celebrar y para que la mayoría pueda pasar un momento agradable, es necesario que la sociedad sea consciente y empática con el otro. “Mas luces y menos ruidos” tiene que ver con esto, con ponerse en el lugar de aquellos que son más sensibles a los decibeles altos, por lo cual es fundamental no utilizar pirotecnia ruidosa.

El nivel de sonido equivalente a una conversación baja es de 10 a 30 decibeles (dB), de 30 a 50 dB una conversación normal, 55 es el nivel de confort acústico promedio, siendo 65 el nivel máximo de tolerancia acústica establecida por la OMS (Organización Mundial de la Salud). Se puede agregar también que 120 dB son considerados como el umbral de dolor acústico. Debito a esto es que año tras año, madres y padres de niños con autismo hacen un necesario y enfático pedido a la población para que no utilicen pirotecnia, y que en los festejos se utilicen más luces y menos ruidos.

Menos de 84 decibeles es son los que exigen los familiares de personas con trastorno del espectro autista, considerablemente más sensibles a los ruidos. “Llegan estas épocas y es necesario decir, como cada año, «más luces, menos ruido», porque sabemos que aún se utiliza la pirotecnia sonora que tiene mucho estruendo y que a las personas con autismo les afecta mucho, más aún a aquellos con hipersensibilidad auditiva”, destacó Valeria Hidalgo, integrante de TGD Padres Rosario en diálogo con Conclusión.

Las personas con autismo que no pueden hablar, lo padecen aún más, porque no pueden expresar lo que les pasa.

Un pedido repetido pero que no deja de realizarse cada año, ya que las personas no son lo suficientemente empáticas para pensar que lo que a algunos les divierte, a otros los afecta de sobremanera. “Queremos contarle a la sociedad en su conjunto que a ellos les afecta mucho, como así también a niños, ancianos, bebés y mascotas. Es importante destacar que las personas con autismo que no pueden hablar, lo padecen aún más, porque no pueden expresar lo que les pasa, no entienden qué son esos ruidos, por lo cual muchas familias se la pasan encerradas o en el baño consolando a su familiar con autismo”.

Muchos son los casos en los que se deben utilizar medicación para que estén dormidos, a la hora en donde se producen la mayor cantidad de estruendos. “Muchas familias pasan por esa situación para que sus niños no se lastimen, dañen a otros o se escapen. Son momentos muy difíciles donde las familias pasan situaciones de importantes crisis”.

Les pedimos que no utilicen pirotecnia ruidosa que afecte a nuestros seres queridos.

Los familiares de personas con autismo también quieren pasar las fiestas como todos, “nosotros también queremos festejar, pero de una manera que no afecte a los demás, por ello no paramos de pedir «más luces menos ruidos». Les pedimos que no utilicen pirotecnia ruidosa que afecte a nuestros seres queridos”.

Desde TGD padres están  iniciando una nueva campaña de información y concientización para que las familias no tengan que estar encerradas en una habitación tapando los oídos de sus hijos, cuando deberían pasar un grato momento de festejo y brindis como lo hace el resto de la sociedad. “Con el cuete que tiras, hay muchos que la pasan mal, y si otro tiene que pasar por esa situación, no está bien. Pensemos en el otro y tengamos empatía, para que nadie la pase mal y todos estemos felices”.

Es necesario que el Estado diga presente y que desde la Municipalidad de Rosario también se realice una campaña de concientización, que vaya en el mismo sentido que el pedido de los familiares. Según comentó el grupo de padres, el intendente Pablo Javkin se comprometió en ser parte de la cruzada. “Nos dijo que tiene intenciones de que hagamos algo juntos, la idea de él fue hacerlo en la semana de la fiestas para darle visibilidad pública, colocarlo en los medios y acompañar en la campaña”.

La pandemia hizo que no se pudieran realizar diferentes actividades de visibilización, que se llevaron a cabo otros años en las calles de la ciudad. “Estamos utilizando mucho la virtualidad y los clubes de la ciudad se han pronunciado en este mismo sentido para apoyar la campaña «Más luces, menos ruido». También estamos trabajando en red con una agrupación llamada «Sin pirotecnia es mejor», que la conforman diferentes agrupaciones y entidades de la provincia. Si bien el grupo es heterogéneo y engloba a por ejemplo familiares de personas con discapacidades, protectoras de animales, entre otros, todos vamos por el mismo fin, la concientización con el uso de la pirotecnia. La idea es que todos los que se ven afectados por el ruido hagamos fuerza de manera conjunta”, concluyó Hidalgo.