La pequeña localidad santafesina de Moisés Ville recibió el visto bueno de la Unesco y se encuentra camino a ser Patrimonio Cultural Histórico de la Humanidad desde que fue propuesto por primera vez en 2012 tras la visita de la familia Samuel a Argentina.
Moisés Ville es el primer asentamiento agrícola judío en Argentina y muestra en sus calles una gran parte de la historia de la provincia. Ubicada en el oeste santafesino a unos 180 kilómetros de la ciudad capitalina, la colonia conserva sus honores históricos intactos poblado con 2.500 habitantes.
Los Samuels, siendo miembros de la Unesco y del Centro «Simon Vicental», fueron los primeros en manifestar el deseo de que el pueblo se convierta Patrimonio de la Humanidad para luego presentarlo durante el mismo año en San Petersburgo en un reunión de Unesco de Patrimonio mundial donde se pidió el del museo de Moisés Ville que resulta, una ficha fundamental en la esencia del pueblo.
«El valor agregado del pueblo no es sólo un tema edilicio, ni de asentamiento, sino que surgió hace 15 años, cuando Moisés Ville fue declarada cuna de la integración cultural. Es decir, es un ejemplo de convivencia para otras etnias, para otras regiones y para otros pueblos», expresó la licenciada en Museología y ex directora del Museo local, Eva Guelbert en diálogo con Conclusión.
Luego, en 2014 -de acuerdo a lo relatado por Guelbert-, se firmó un Convenio de Cooperación entre el Centro Simon Vicental y la Universidad Nacional de La Plata para «estudiar los estudios técnicos necesarios para ingresar a Moises Ville en la lista indicativa de la República Argentina de sitios a nominar a la lista de Patrimonio Mundial». Un año después, se eleva la presentación al Comité Argentino de Patrimonio Mundial, quien lo aprueba. Y el 29 de junio de ese mismo año, la Delegación Permanente de la República Argentina, presenta al Centro de Patrimonio Mundial de Unesco, la documentación para la incursión de Moises Ville en la lista indicativa».
Es poblado histórico Nacional, es un pueblo auténtico, con identidad. Es uno de los principales pueblos identitarios del país
La rica arquitectura del pequeño sitio del oeste santafesino se preserva como diamante. La mayoría de los edificios que se mantienen en pie le dan personalidad y un tono distintivo a la idiosincrasia de la población.
Pero lo más valioso, deja de lado lo tangible. «Es un testimonio de procesos de migración de comunidades judías del este de Europa a América del Sur y Argentina. Es el primer pueblo establecido en el país. Y es un asentamiento urbano, rural y a su vez, tiene una forma de asentamiento lineal, grupal y comunitario, solidario distinto a cualquiera otra colonia», manifestó la Museóloga.
Quien a la vez remarcó: «Es una fiesta de integración cultural que refleja el espíritu de convivencia etre diversas comunidades de inmigrantes, por eso por su significado es un testimonio de ideas de validez universal, como el respeto de los Derechos Humanos y a la identidad cultural en la diversidad».
Moisés Ville conserva tres sinagogas, dos de ellas (Brener y Barón Hirsch) son puntos de encuentro para sus habitantes y están dentro del circuito turístico. También posee el Museo Histórico “Aarón Goldman” nombre del primer rabino que pisó tierras moisesvillenses, una escuela en su momento primaria, secundaria y única a nivel sudamericano en la formación de maestros hebreos, un cementerio israelita el primero de su tipo en Argentina, el salón teatro Kadima declarado edificio de Patrimonio Histórico de Santa Fe, dos bibliotecas y un hospital.
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En la actualidad, la colonia se encuentra registrada y se ha dado inicio para la elaboración del expediente a cargo también del Instituto de Investigaciones en Turismo de la Universidad Nacional de La Plata y hay consenso de las autoridades locales y comunitarias que trabajan desde el desde el 2015 con el grupo Mosises Ville Unesco, que es un grupo de ex pobladores que buscan crear conciencia y conseguir los medios para que ese sueño se haga realidad.
«Quien visite Moisés Ville va a encontrar un pueblo distinto, un circuito que lo va a fascinar y una visita a un museo que los va a atraer y van a aprender», señaló Eva Guelbert.
En el mes de octubre del 2019, el pueblo cumple 130 años, la misma cantidad de años de la colonización Judía en Argentina que se suma a los 30 años del Museo Histórico Comunal, Rabino “Aarón Goldman”.
«Es poblado histórico Nacional, es un pueblo auténtico, con identidad. Es uno de los principales pueblos identitarios del país», concluyó la especialista.
