Al menos una decena de personas murieron y otras 18 están desaparecidas como consecuencia de inundaciones repentinas ocurridas en el sur de India.

Tres autobuses fueron arrastrados por el agua en el estado costero de Andhra Pradesh y los rescatistas pudieron sacar de esos vehículos una decena de cuerpos, según medios de comunicación locales.

Pero otras 18 personas siguen desaparecidas, indicó el portal The News Minute.

El servicio meteorológico informó que las fuertes tormentas continuarán en varias regiones del sur, informó la agencia de noticias AFP.

En los últimos años, el sur de India fue afectado por fenómenos meteorológicos extremos, cada vez más imprevisibles, debidos al cambio climático y acentuados por la deforestación, la construcción de represas y el urbanismo excesivo, según especialistas.

Decenas de personas fallecieron desde octubre pasado en inundaciones y deslizamientos de tierra causados por las intensas precipitaciones.

Las autoridades del estado de Kerala prohibieron ayer el acceso al templo de Sabarimala, uno de los santuarios más sagrados del hinduismo y destino de una peregrinación anual que comenzó la semana pasada.

Por otro lado, la crecida del río Pamba, considerado sagrado, obligó a las autoridades a prohibir que los fieles se acerquen al curso fluvial durante un día, informó hoy el diario Hindustan Times.