La ministra de Exteriores británica, Liz Truss, podría convertirse este lunes en la nueva líder del Partido Conservador y nueva primera ministra, en reemplazo de Boris Johnson, según anticipan las encuestas, que le dan una ventaja de más de 30 puntos sobre el exministro de Finanzas, Rishi Sunak, tras una campaña electoral dominada por el aumento del costo de la vida debido a la inflación y la crisis energética.

El nombre del sucesor de Johnson se conocerá en un acto en Londres y la toma de posesión se celebrará al día siguiente en la residencia veraniega de la reina Isabel II de Balmoral, en Escocia. La monarca, de 96 años, modificó la tradición de recibir al primer ministro en el Palacio de Buckingham debido a sus «problemas de movilidad».

El nuevo o la nueva líder «tory» deberá afrontar no solo el alto costo de vida, sino que también estará obligado a convocar a elecciones generales antes de enero de 2025.

Quien se imponga en la elección conservadora tomará inmediatamente las riendas del Gobierno para hacer frente a la crisis económica que vive el país, amenazado por las protestas y huelgas en un contexto de inflación descontrolada que alcanza ya el 10% y se encamina a superar el 13% a fin del año.

Muchos conservadores creen que su próximo líder debe abordar la crisis energética, que se suma a la mayor inflación de los últimos 40 años, de forma inmediata o el partido correrá el riesgo de ser derrotado en las próximas elecciones generales.

Mientras tanto, Sunak y Truss, que en julio fueron los dos candidatos elegidos por los parlamentarios conservadores de entre una decena de aspirantes, lucharon durante todo agosto para persuadir a los miembros del partido de que tienen lo necesario para dirigirlo y para conducir el país después de la renuncia de Johnson.

Durante la campaña, Truss, de 47 años, afirmó que no habría nuevos impuestos ni racionamiento energético si se convirtiera en primera ministra, y dejó entrever que otorgará más ayudas para garantizar que las personas no enfrenten facturas de energía que no puedan pagar.

Se cree que su primera medida será reducir la tasa del IVA del 20% al 15%, además de otros impuestos para ayudar a los hogares durante el invierno, luego del aumento en el costo anual del gas y la electricidad en más del 80%, con tarifas que superan los 4.000 dólares anuales.

Truss se comprometió también a promover la ayuda y el suministro de armamento a Ucrania porque considera que «es vital la derrota de (el presidente ruso, Vladimir) Putin».

Por su parte, Sunak, de 42 años, que diseñó las medidas de respaldo durante las restricciones del coronavirus, afirmó que su programa no está basado en lo que la gente «quiere oír», sino en lo que «necesita escuchar», y defendió su argumento de que primero hay que combatir la inflación y controlar el déficit, para luego pensar en reducir los impuestos.

Sin embargo, según las encuestas, los miembros del partido creen que ninguno de los candidatos tiene lo que se necesita para lidiar con la difícil tarea de unificar a la agrupación, cuya contienda por el liderazgo se caracterizó por luchas internas, mientras se enfrenta a un contexto de incertidumbre económica.