Donald Trump y Vladimir Putin ofrecieron una conferencia este lunes tras sostener una extensa reunión en privado y una mesa de trabajo a la que se unieron sus asesores, en el marco de la primera cumbre formal que sostienen ambos mandatarios, cuyas respuestas tocaron principalmente la investigación sobre la injerencia rusa en las elecciones estadounidenses.

«Creo que podemos llamarla una exitosa ronda de negociaciones. Analizamos el presente y futuro de la relación bilateral y los temas globales», resumió Putin, el primero en hablar en la conferencia.

Si bien admitió que «está claro que la relación no pasa por un buen momento», subrayó que «la Guerra Fría es algo del pasado».

Respecto a la intromisión rusa en los comicios norteamericanos, Putin volvió a negar las acusaciones. «Debo repetir lo que he dicho más de una vez, incluyendo una reunión personal. El gobierno ruso nunca interfirió y no planea interferir en los asuntos internos de Estados Unidos, incluyendo el proceso electoral».

En otro momento, ante la pregunta de un periodista, confirmó que prefería que Trump venza a Hillary Clinton en el 2016. «Sí, lo quería, porque él habló acerca de mejorar la relación entre EEUU y Rusia».

Por si fuera poco, además de defender a Putin y rechazar las conclusiones de su propio Gobierno, Trump aprovechó la ocasión para hacer frente -a los ojos del mundo entero- al FBI, la institución alrededor de la cual EEUU lleva casi un siglo construyendo el ethos de la justicia inquebrantable.

«No veo razón alguna por la que [Putin lo hubiera hecho]», fue la insólita respuesta de Trump cuando un reportero le preguntó si creía en la conclusión de las agencias de inteligencia respecto a que el presidente ruso había estado detrás del ataque.

«Le gané a Hillary Clinton fácilmente», agregó en otro momento, a pesar de que Trump perdió el voto popular por 3.5 millones de votos, la distancia más grande en la historia de EU. «Ganamos esa carrera, y es una pena que haya aunque sea una pequeña nube encima de eso».

Trump también se quejó de que la relación Rusia-EU «nunca había estado peor que ahora», aunque celebró que eso había cambiado «hace unas cuatro horas», refiriéndose a la reunión a puerta cerrada que sostuvo con Putin. El estadounidense dijo que la culpa de la deteriorada relación era de ambos países: «Creo que Estados Unidos ha sido tonto. Creo que todos hemos sido tontos. Todos somos culpables», dijo en un tono conciliador que rara vez utiliza con naciones aliadas.

Putin, por su parte, dijo frente a las cámaras que «el Estado Ruso nunca ha interferido y no va a interferir en los asuntos internos estadounidenses, incluyendo el proceso electoral». Al igual que Trump, negó que haya existido colusión: «Es un absoluto disparate. Tal como lo dijo el presidente [Trump]». A pesar de rechazar las acusaciones, el mandatario ruso se ofreció a interrogar a los 12 agentes militares acusados por Mueller.

Pero sin duda la declaración que pinta a Putin de cuerpo entero llegó cuando le preguntaron si confiaba en Trump: «No puedes confiar en nadie», respondió el ex agente de la KGB.

AFP PHOTO / Brendan Smialowski