Con motivo del Día Mundial del Refugiado, que se celebra, el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, instó a la comunidad internacional a incrementar la cooperación para resolver la crisis migratoria.

«Reafirmamos nuestro compromiso con la protección y la integración de las personas que se ven obligadas a huir de sus países. Impulsemos una mayor cooperación internacional para paliar la situación», publicó Sánchez en su cuenta de Twitter. También llamó a garantizar la igualdad de oportunidades a todos.

Por su parte, el Ministerio de Exteriores español priorizó la acción humanitaria «coordinada y ambiciosa» para los refugiados, informó la agencia de noticias Sputnik.

El mundo alcanzó en 2020 el récord de 82,4 millones personas desplazadas, obligadas a huir de guerras, conflictos y persecuciones, y reconstruir sus vidas lejos de sus hogares, una cifra sin precedentes históricos y que equivale al 1% de la población mundial.

Este índice crece por noveno año consecutivo, según un informe publicado el viernes pasado por la Agencia de la ONU para los Refugiados (Acnur).

Las estadísticas demuestran que «a pesar de la pandemia y de las llamadas a un alto el fuego a nivel global, los conflictos siguen expulsando a personas de sus hogares», advirtió Acnur.

Asimismo, el organismo detalló que unos 35 millones de estos desplazados, el 42% del total, tienen menos de 18 años.

Entre 2018 y 2020, un millón de niños nacieron como refugiados, informó la agencia de noticias Europa Press.

El informe de Acnur demostró que de los 26,4 millones de refugiados que hay registrados en todo el mundo, el 68% proceden únicamente de cinco países: Siria (6,7 millones), Venezuela (4 millones), Afganistán (2,6 millones), Sudán del Sur (2,2 millones) y Birmania (1,1 millones).