«Europa se convertirá en un califato islámico si no hacemos nada con respecto a nuestras raíces», manifestó Matteo Salvini, vicepresidente y ministro del Interior de Italia, tras resaltar la importancia de la inmigración controlada y la protección de fronteras.

El dirigente político de orientación nacionalista deslizó, en una entrevista con el canal húngaro M1, que las raíces cristianas están en creciente peligro porque algunas capitales del viejo continente ya se encuentran en manos del Islam.

Salvini, secretario federal del partido de la Liga Norte, puso de ejemplo la doctrina migratoria de países como Estados Unidos, Canadá y Australia para proteger las fronteras no de su propia Italia sino ya de toda la Unión Europea.

Además, señala con datos específicos que tras reforzarse los límites marítimos del país italiano «los desembarcos ilegales» disminuyeron en un 93 por ciento, mientras que los casos de muertes de inmigrantes se redujeron a la mitad.

«Aparte del tema de la seguridad, las cuestiones de trabajo, familia, las tradiciones cristianas y la protección del medio ambiente deben estar en el centro de la nueva política europea», añadió Salvini, citado por el portal Hirado y el canal de noticias Actualidad RT.

Vale resaltar como último dato que el jueves pasado, el funcionario italiano tuvo una reunión en Budapest con el primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, que también apoya la idea de convertir a Europa en un continente de fronteras sólidas para evitar estas cuestiones.