Fuerzas turcas y rebeldes sirios aliados retomaron «el control total» de Jandairis, una localidad del enclave de Afrin (noroeste de Siria) en donde Ankara lanzó una ofensiva contra una milicia kurda, anunció el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).

«Con este avance, las fuerzas turcas retomaron el control de las cinco principales localidades del enclave», según el OSDH, y los rebeldes aliados a Ankara se encuentran a una decena de kilómetros de la principal ciudad de la región, Afrin.

Turquía lanzó el 20 de enero una ofensiva contra Afrin para expulsar a la milicia kurda Unidades de Protección Popular (YPG), considerada como «terrorista» por Ankara. Esta milicia, aliada a Washington, tuvo un papel crucial en Siria en la lucha contra los yihadistas del grupo Estado Islámico (EI).

El comandante Abu Saleh, del grupo rebelde Faylaq al-Sham, que participa en la ofensiva turca, confirmó que la ciudad fue tomada. «Toda la ciudad de Jandairis fue liberada», aseguró.

La población huyó de la ciudad por la violencia, agregó. Desde el lanzamiento de la ofensiva turca, 199 civiles, de ellos 32 niños, murieron en bombardeos en Ankara, según el OSDH.

El martes, las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), coalición de combatientes kurdos (YPG) y árabes apoyada por Washington, anunciaron el redespliegue en Afrin de unos 1.700 combatientes desplegados hasta ahora en el este del país en donde combatían contra el grupo Estado Islámico.