El primer ministro británico, Boris Johnson, se abocó a su trabajo tras su arrollador triunfo electoral, en una jornada en la que nombró un ministro y anunció planes para que el Parlamento vote esta semana la ley de salida del Reino Unido de la Unión Europea (UE).

Tal como se esperaba, el líder conservador hizo una mini remodelación de su gabinete y nombró a un nuevo ministro para Gales, antes de dar la bienvenida a los 109 diputados de su partido electos en los comicios de la semana pasada.

Pero su prioridad es cumplir su promesa de ejecutar el Brexit antes del plazo de fin del mes que viene y luego de años de turbulento debate en el Parlamento y en toda la nación en torno a la permanencia en la UE.

Johnson presentará su proyecto de ley de divorcio de la UE esta semana y pedirá a los diputados que lo voten el viernes, dijo su vocero.

«El gobierno acaba de ser electo con una clara mayoría para cumplir con el Brexit, y estamos enfocados en hacer sancionar la legislación para asegurar que suceda a tiempo para el 31 de enero», señaló.

La simple promesa de Johnson de «ejecutar el Brexit» caló hondo en las elecciones anticipadas del jueves pasado, que muchos vieron como una repetición del referendo de mediados de 2016 sobre salida de la UE.

Esa opción ganó por estrecho margen, pero se siguió de años de debate en el Parlamento sobre cómo, o incluso cuándo, debía el Reino Unido poner término a casi cinco décadas de integración con sus vecinos más cercanos y principales socios comerciales.

La discusión virtualmente tocó a su fin luego de que los conservadores ganaron con el 44% de los votos y superaron por 80 bancas la mayoría absoluta en la Cámara de los Comunes, que tiene un total de 650 escaños.

El control del Parlamento por los conservadores es el mayor desde la época de Margaret Thatcher, en la década de 1980.

El Partido Labortista, en tanto, sufrió su peor derrota desde la Segunda Guerra Mundial, lo cual obligó a a su líder, Jeremy Corbyn, a anunciar su renuncia para principios de enero.

Se espera que Johnson retoque apenas su actual gobierno y que recién avance en una reforma más profunda una vez que se haya cumplido con el objetivo primero del Brexit.

En un anticipo, hoy nombró a Simon Hart como secretario para Gales, informó la BBC.

El Reino Unido y la UE se tendrán que embarcar luego en más negociaciones todavía para alcanzar un nuevo acuerdo de comercio y seguridad.

El acuerdo de divorcio al que llegaron Johnson y la UE en octubre contempla un periodo de transición hasta fines de 2020 para mantener esas conversaciones, y durante el cual los vínculos entre ambas partes seguirán siendo en general idénticos a los de ahora.

Los nuevos diputados jurarán mañana su cargo.

El jueves, la reina Isabel II leerá el programa legislativo de Johnson en una ceremonia en el Parlamento.

Además del Brexit, se espera que el programa incluya un fuerte aumento del gasto social, en parte para asegurarse votos de laboristas de toda la vida pero que en la última elección no apoyaron a su partido.

Después de nueve años de gobiernos conservadores que impusieron fuertes recortes en el gasto, Johnson ha prometido más dinero para escuelas y hospitales, para la policía e infraestructura.

Esto mitigó mucho el impacto de las advertencias de Corbyn durante la campaña de que habría más ajustes, especialmente en el sistema de salud.

Los laboristas, mientras tanto, siguen discutiendo qué fue lo que salió mal, culpando al Brexit, a las posturas demasiado izquierdistas de Corbyn y a la influencia de la prensa de derecha.