La candidatura de Keiko Fujimori a la presidencia de Perú salteó un obstáculo, al declarar el Jurado Electoral Especial de Lima (JEE) infundado el pedido para que la hija del ex mandatario Alberto Fujimori fuera excluida de la carrera por la jefatura del Estado, aunque sí quedó afuera de la boleta al Congreso su postulante a la segunda vicepresidencia, Vladimiro Huaroc.

El ex juez Malson Urbina y el congresista Heriberto Benítez, que presentaron las solicitudes de exclusión, habían anunciado que de recibir un fallo adverso apelarán para que el caso sea resuelto por el Jurado Nacional de Elecciones (JNE), el máximo ente electoral peruano.

El JNE señaló en su resolución que la candidata no ofreció ni entregó dinero o dádivas a los ciudadanos para lograr votos, una conducta que está prohibida por la ley de elecciones y por la que se había pedido que se le retire de los comicios.El organismo agregó que «tampoco se ha presentado una prueba idónea» que acredite la vulneración de la Ley de Organizaciones Políticas.

Urbina y Benítez habían pedido la exclusión de la candidata tras señalar que esta participó en una actividad de la agrupación juvenil Factor K en la que se entregaron premios en efectivo y se hizo propaganda a su partido, algo que Fujimori y sus voceros niegan.

Al respecto, el JNE consideró que la actividad se trató «de la final de un concurso de baile organizado por el colectivo Factor K y no por la referida organización política (Fuerza Popular), por ende, el evento siempre tuvo naturaleza premial (sic) y no de un evento proselitista».

«En conclusión, la candidata a la presidencia de la República Keiko Fujimori, por el partido político Fuerza Popular, no ha incurrido en la conducta prohibida de ofrecer ni entregar dinero o dádivas con la finalidad de obtener votos», señaló.