Si el caso en torno a Jeffrey Epstein poseía suficientes condimentos, el arresto de su pareja, Ghislaine Maxwell, y las posteriores revelaciones en torno a su figura, podrían aportar giros inesperados a la historia.

De acuerdo con varios artículos publicados esta semana por medios británicos, Maxwell vivió del dinero que Jeffrey Epstein le dio en el transcurso de su sórdida asociación de 30 años que comenzó como un romance y terminó -presuntamente- en abusos sexuales sistemáticos por parte de ambos contra niñas menores de edad.

Maxwell, de 58 años, se encuentra actualmente bajo custodia en espera de su próxima comparecencia ante el tribunal, que será en Nueva York, acusada de tráfico sexual infantil y perjurio. Si es declarada culpable, enfrenta 35 años tras las rejas.

Fue arrestada el jueves pasado en una propiedad de USD 1.000.000 en New Hampshire que pagó en efectivo en diciembre. Desde entonces, se ha revelado en los documentos de la corte que tiene 15 cuentas bancarias en todo el mundo, entre las cuales regularmente cambia dinero.

Maxwell será trasladada a Nueva York para comparecer en el juicio, cuyos cargos formales son “ayudar” a Epstein a “explotar y abusar sexualmente de múltiples” niñas entre 1994 y 1997, además de mentir a la Justicia sobre el asunto.

Por ahora, no hay una fecha fijada para su primera aparición ante un juez en Manhattan, donde se deberá decidir también si ingresa en prisión o si queda en libertad a la espera de juicio. La Fiscalía, por ahora, ha pedido que quede detenida sin derecho a fianza dado que plantea un “riesgo de fuga extremo”.

La fiscal en funciones del Distrito Sur de Nueva York, Audrey Strauss, que anunció los cargos contra Maxwell unas horas antes, señaló que la acusada tiene “tres pasaportes, grandes cantidades de dinero, amplias conexiones internacionales y absolutamente ninguna razón para quedarse en EEUU y afrontar la posibilidad de una larga sentencia”.

Entre 2007 y 2011, Epstein -que se suicidó en la cárcel en agosto pasado mientras esperaba el juicio por cargos de tráfico sexual- le habría dado al menos USD 20 millones.

Esos intercambios monetarios pueden estar detrás de las sospechas que han emergido en los últimos días sobre la posibilidad de que Maxwell enfrente el mismo destino que Epstein y se suicide en prisión.

Es lo que sugirió Spencer Kuvin, abogado de varias de las presuntas víctimas de la pareja, en una entrevista con el medio británico Daily Mail, en la que aseguró que Maxwell “sabe demasiado” y que las personas poderosas pueden querer silenciarla incluso mientras está encerrada.

“Puede ser que ella no logre manejar el miedo a lo que le va a pasar y tome el asunto en sus propias manos, o puede que haya personas que tienen mucho miedo de lo que ella tenga que decir”, predijo Kuvin.

Maxwell tiene una asombrosa red internacional de amigos y conocidos, algunos de los cuales, sin duda, la han ayudado a mantener la calma desde el suicidio de Epstein.

Además, este viernes trascendió la noticia de que Maxwell podría “dar nombres” y “cooperar completamente” con el FBI en lo que dure la investigación, lo que podría sumar a las tensiones y los temores en torno suyo por parte del círculo cercano.

Sin dudas, uno de los que podría estar preocupado por el tema es el Príncipe Andrew, debido a lo que podría revelar Maxwell si finalmente decide colaborar con la Justicia, afirmó un ex asociado de Jeffrey Epstein.

De hecho, el primer ministro británico, Boris Johnson, se expresó públicamente sobre el hecho este viernes, expresando que “Andrew tiene una historia que contar”. Y agregó: “Creo que las simpatías de todos están más relacionadas con las víctimas de Jeffrey Epstein, pero no esperes que comente sobre asuntos que afectan a la Familia Real”.

Virginia Roberts Giuffre, la denunciante de Epstein que arrastró a Andrew al fango alegando que tuvo relaciones sexuales con él a principios de la década de 2000, celebró el arresto de Maxwell y la definió como una “criatura insidiosa” que merecía ser encerrada. Andrew niega las acusaciones en su contra y asegura no recordar haber conocido a la señorita Roberts.

No obstante, El segundo hijo varón de la reina Isabel II se vio obligado a abandonar sus tareas reales debido a la indignación general que provocó una entrevista que concedió a la BBC a fines de 2019 en la cual defendió su amistad con Epstein.

El jueves, una fuente cercana al equipo legal del duque de York dijo que el Príncipe Andrew estaba ‘desconcertado’ por los comentarios de los fiscales que querían hablar con él. “El equipo del duque sigue desconcertado dado que nos hemos comunicado dos veces con el Departamento de Justicia en el último mes y hasta la fecha, no hemos tenido respuesta”.

El jueves, la fiscal federal interina Audrey Strauss dijo que la investigación sobre las décadas de abuso de Epstein está en curso y que ella ‘daría la bienvenida al’ Príncipe Andrew ‘para que presente una declaración’, lo que provocó especulaciones de que él podría centrar su atención entre las personas que investigan.

‘Le daríamos la bienvenida al Príncipe Andrew para hablar con nosotros. Nos gustaría tener el beneficio de su declaración. Nuestras puertas permanecen abiertas. Le daríamos la bienvenida y será una oportunidad escuchar su declaración‘’, dijo.

Por el momento, las especulaciones en torno a lo que pude o no decir Maxwell van en aumento, mientras ella misma mide cuánto dirá a la justicia.