La Fiscalía brasileña denunció a Microsoft por recolectar datos personales «sin el expreso consentimiento de los usuarios» a través de su sistema operativo Windows 10, y reclamó a la justicia una multa de «al menos 10 millones de reales» (unos 2,87 millones de dólares) «por los daños morales ya causados».

El Ministerio Público Federal señaló en la denuncia que la instalación y actualización del sistema operativo permite que «la empresa obtenga diversas informaciones sobre consumidores, como geolocalización, contenido de correos electrónicos, hábitos de navegación e historial de búsquedas».

El organismo demandó también a la multinacional estadounidense que el software deje de colectar informaciones personales «de forma automática» y que además «sean incluidas alertas a los usuarios sobre las consecuencias sobre autorizar la transferencia» de datos.

De acuerdo con las autoridades, Microsoft ofrece detalles a los internautas sobre el asunto pero «sin alardes» y a través de «dos documentos extensos a los que normalmente no acceden los consumidores».

«No basta con que haya información. Esta tiene que ser destacada, precisa, de fácil comprensión y revocable en cualquier momento. La simple aceptación, casi automática, por el consumidor de la versión recomendada por Microsoft en Windows 10 no puede ser considerada como suficiente para el entendimiento de todas las consecuencias», señaló el MPF.

La Fiscalía alertó, por otro lado, que numerosos órganos públicos brasileños usan ese sistema operativo, entre ellos la Justicia Electoral y Federal y varios ministerios.

En este sentido y «ante la gravedad de la situación», el Ministerio Público dio a la empresa quince días para que adecue el software con objeto de que deje de estar programado para recoger informaciones personales de sus usuarios, informó EFE.