Los militares que acompañaron a Juan Guaidó denuncian que el autoproclamado presidente «los abandonó» y que «nunca tuvo un plan para ellos». Ahora, también tienen temen volver a Venezuela porque les aguardan, al menos 30 años de cárcel por «traición a la patria y terrorismo».

Según relataron, tras abandonar Venezuela, el agente del Gobierno estadounidense «los dejó tirados». «Creímos que nos iban a entrenar y capacitar para entrar a Venezuela junto a una coalición de países y acabar con el régimen», afirmaron.

Los desertores que permanecen en Colombia son cerca de setecientos, entre militares y Guardias Nacionales, y trescientos familiares que les acompañan.

«La verdad es que no tenían un programa para nosotros, nos dejaron tirados como a perros», aseguraron y remarcaron» Es ACNUR y el gobierno colombiano los que más nos han ayudado».