La ministra del Interior británica, Suella Braverman, dimitió este miércoles, con una crítica poco disimulada a la primera ministra, Liz Truss, que está tratando de restaurar autoridades frente a legisladores que piden abiertamente su dimisión.

Grant Shapps, que el 4 de octubre sostuvo que Truss sólo tenía 10 días para salvar su cargo, sustituirá a Braverman, en un intento de la primera ministra por atraer a críticos para sofocar una rebelión que va en aumento.

Truss, que lleva poco más de seis semanas en el poder, ha estado batallando por su supervivencia política desde que el 23 de septiembre lanzó un «minipresupuesto», un programa económico de grandes recortes fiscales sin financiación, que hizo temblar los mercados financieros.

>>Te puede interesar: Liz Truss pierde autoridad después de que su nuevo ministro de Finanzas anulara medidas fiscales

Horas después de que dijo a los legisladores que lamentaba los errores cometidos, pero que no iba a dimitir, se informó de la marcha de su ministra del Interior.

Al confirmar su marcha, Braverman dijo que había infringido las normas, al enviar un documento oficial desde su correo electrónico personal a un colega parlamentario, pero añadió que estaba preocupada por el Gobierno y que esperar que los problemas desaparezcan no era un enfoque viable.

«He cometido un error, acepto la responsabilidad y dimito», dijo en una carta a la primera ministra.

>>Te puede interesar: Comenzó la danza de nombres para reemplazar a Truss si deja de ser primera ministra

Los medios de comunicación sugieren que Truss y Braverman podrían haber chocado por la inmigración. Braverman, que dijo recientemente que soñaba con ver a los solicitantes de asilo deportados a Ruanda, ha defendido una línea dura en cuanto a las cifras de inmigración.

Truss había sugerido que las restricciones a la inmigración podrían levantarse en algunos sectores de la economía; mientras que para su nuevo ministro de Economía, Jeremy Hunt, que trabaja para encontrar formas de apoyar la economía, la flexibilización de las normas de inmigración podría ser una opción.