La búsqueda del avión de la Fuerza Aérea de Chile desaparecido cuando viajaba a la Antártida continuaba este miércoles, en medio de la conmoción que aún sacudía al país trasandino por la tragedia. En total, viajaban 21 pasajeros y 17 tripulantes.

«Con un dolor infinito prometo que haremos lo humanamente posible por encontrar el avión e investigar que pasó. Son militares y civiles que hacen soberanía en la Antártica. Frente a la pena e impotencia de sus familias solo les digo que los apoyaremos y diremos siempre la verdad», sostuvo el ministro de Defensa de Chile, Alberto Espina, a través de su cuenta de Twitter.

Las tareas de búsqueda de la aeronave contaban con buques y aviones locales, pero también con ayuda de distintos países: la Argentina sumó un avión C-130, al igual que Uruguay; al tiempo que Estados Unidos aportó dos órbitas satelitales para captura de imágenes.

En ese sentido, el presidente de Chile, Sebastián Piñera, mantuvo una conversación telefónica con su par de Brasil, Jair Bolsonaro, quien «ofreció toda la ayuda» de su país «en las tareas de búsqueda del avión de la Fuerza Aérea».

«Con la ayuda de muchos estamos haciendo todos los esfuerzos humanamente posibles en las tareas de búsqueda del avión», añadió el mandatario.

Un avión C130 Hércules de la Fuerza Aérea de Chile perdió contacto radial a las 18:13 del pasado lunes al sur de Tierra del Fuego, cuando se dirigía a la Base Aérea Antártica Presidente Eduardo Frei Montalva: viajaban 21 pasajeros y 17 tripulantes, que tenían la misión de revisar un oleoducto flotante de abastecimiento de combustible de la estación antártica, entre otras tareas.

«Transcurridas más de siete horas desde que se perdiera el contacto radial, (la aeronave) ha sido declarada como siniestrada», informó la FACH.