Por Nabih Yussef*

[Barcelona] A pesar de la victoria de Ciudadanos, de perfil pro España, la mayoría del electorado catalán ha optado por un partido de la oferta electoral independentista. Ciudadanos confirma su victoria y se queda con la primera minoría en el Parlamento catalán, donde seguramente el Partido Popular (PP) con menos de 5%, acompañará a sus aliados políticos para frenar el secesionismo en Catalunya.

Los partidos independentistas Esquerra Republicana, la CUP y Juntos por Catalunya, obtienen más del 50% de los votos y confirman que en Catalunya se respira independencia. No obstante, sus máximas figuras se encuentran neutralizadas desde Madrid. Oriol Junqueras, líder de la izquierda catalana, se encuentra preso sin sentencia firme y acusado de delitos de terrorismo y rebelión.

De igual manera, Carles Puigdemont de Juntos por Catalunya, se encuentra exiliado en Bélgica. Al ser electos, inmediatamente gozarían de fueros parlamentarios y deberían ser liberados por las fuerzas de seguridad y garantizados sus derechos de movilidad.

No obstante, resta saber qué decisión tomará Madrid, que mantiene a las fuerzas policiales bajo sus órdenes y ve derrumbar su estrategia por fraguar las elecciones catalanas.

Por el lado de los proespañoles, Inés Arrimadas de Ciudadanos, ha conseguido ser la candidata más votada de las elecciones con más del 25% de los votos. Sin embargo, se mantienen incógnitas sobre si la dirigente contará con los votos para conformar gobierno.

La atomización de los partidos independentistas podría otorgar a la líder liberal, un escenario que le permitiera versatilidad política y margen de maniobra para atraer a otras fuerzas políticas como Podemos y conformar un gobierno en minoría. Arrimadas ha escogido la simbólica Plaza España para su mitin político.

Visiblemente contenta, la dirigente manifestó que “la mayoría de los catalanes, va a seguir siendo españoles y europeos”, al tiempo que subrayó “los separatistas han perdido fuerzas en estas elecciones, si ya se sabía que no tenían futuro ahora ha quedado más claro”.

Una centena de simpatizantes al grito de “presidenta, presidenta” cierra la campaña pero abre el escenario de una nueva etapa en la crisis de Catalunya.

*Licenciado en Relaciones Internacionales y Director del Consejo de Estudios Interdisciplinarios Económicos y Políticos www.CEIEP.org

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