Italia, por medio de la organización que vela por el derecho del consumidor, sancionó con multas millonarias a Apple y Samsung por hacer más lentos sus dispositivos con actualizaciones de software.

La Autorità Garante della Concorrenza e del Mercato ha dictaminado, tras una investigación iniciada en enero, que ambas compañías utilizaron las actualizaciones de sus sistemas operativos para reducir la velocidad de los teléfonos más antiguos.

Apple deberá desembolsar unos 10 millones de euros, mientras que Samsung tendrá que pagar unos 5 millones de euros.

Los motivos de estas multas son que Apple generó problemas con la instalación de su versión IOS 10 sobre dispositivos iPhone 6, debido a que esta actualización fue pensada para iPhone 7, celular que disponía de más energía para su funcionamiento, lo que ocasionaba que la versión anterior no pueda soportarlo y los teléfonos se apagasen.

Por su parte, Samsung realizó algo similar con la actualización del sistema operativo Android Marshmallow 6.0.1 en los dispositivos Note 4. Esta actualización estaba pensada para optimizar el rendimiento de los dispositivos Note 7, pero en los Note 4 ocasionaba un mal funcionamiento del dispositivo, lo que provocó que cientos de usuarios pagasen grandes sumas de dinero en reparaciones ya que para esa fecha la garantía del producto había expirado.

El ente italiano indica que las decisiones de las empresas de hacer que sus clientes instalasen un firmware más nuevo en los teléfonos más antiguos “causaron serias disfunciones y redujeron significativamente el rendimiento, acelerando así el proceso de reemplazo”.