El hombre clickeó «Me gusta» en varios comentarios que acusaban a un activista de los derechos de los animales de ser «racista», «fascista» y «antisemita». Los comentarios se hicieron en 2015 durante unas discusiones en Facebook sobre qué grupos de bienestar animal debían ser invitados a participar en un festival vegano. A partir de esto, Erwin Kessler, activista y presidente de la Asociación contra las fábricas de animales, denunció entonces a una docena de individuos que participaron en esos intercambios por atentar contra su honor.

“Con el Me gusta, el acusado se apropia de un contenido difamatorio y lo hace suyo», considera la sentencia. Además, destacó el tribunal, “al darle a Me gusta el internauta está haciendo accesibles esos comentarios para un gran número de personas”.

En el caso, varias personas fueron condenadas, pero solamente un hombre fue multado por dar Me Gusta a comentarios de otros. “El Me gusta se asimila a la aprobación y la propagación de un propósito», aseguró el abogado especialista en derecho de los medios y tecnologías de la información Nicolas Capt.

Pero Amr Abdelaziz, abogado de uno de los acusados en el caso, dijo que los tribunales deben clarificar si un «Me gusta» debe tener el mismo peso que otras formas de expresión citadas comúnmente en casos de difamación. «Si los tribunales quieren perseguir a gente por dar «Me gusta» en Facebook, podríamos necesitar triplicar el número de jueces en este país», dijo. «Podría convertirse fácilmente en un asalto a la libertad de expresión».