Por Jennifer Hartkopf

Marzo batió récord. Según un informe expuesto por el concejal rosarino Jorge Boasso, durante ese mes los accidentes de tránsito se acrecentaron, presentando el número más alto del primer trimestre del año. Así, el número de demandas registradas pasó de 2.069 en enero y 2.060 en febrero a las 2.393.

Asimismo, esta cifra viene acompañada de un aumento de los accidentes del tipo de colisión “en cadena”, siendo las calles con más denuncias aquellas en las que existen colegios, hospitales y clubes cercanos.

En diálogo con Conclusión, el edil radical disparó contra el Ejecutivo municipal y dijo que “no existen los controles adecuados. Cuando el municipio acentúa los controles, como por ejemplo con el control de alcoholemia, el número de accidentes se reduce notablemente. Por ejemplo en el caso del alcohol, cuando pasaron de realizar 5.000 controles a realizar 12.000 se bajó de un 12 por ciento a un 9 por ciento”.Y enseguida agregó: “Pasa que los controles solamente se hacen en horario municipal, después a la tarde y tardecita ya no controla nadie y los controles se relajan”.

En relación a los choques “en cadena”, Boasso explicó que son lo que los abogados llaman “con causa, ya sea por distracción del conductor, por el mal estado de las calles, por mala o falta de señalización. Depende del Ejecutivo municipal proponer medidas de tránsito que reduzcan los accidentes”.

A modo de solución, señaló la necesidad de implementar controles “que vayan más allá” e instó al municipio a investigar sobre las causas que provocan estos accidentes. “Si se observan accidentes consecutivos en una misma esquina, es necesario un inspector las 24 horas controlando el tránsito y realizando un análisis de por qué se producen en ese lugar tantos choques, para luego presentar un estudio detallado que permita modificar la situación. Para eso está la Ingeniería de Tránsito para que tome las decisiones correspondientes”, puntualizó.

Respecto a las calles con más denuncias en el mes de marzo figuran Moreno al 1100 (entre Mendoza y San Juan) liderando el top 10, Alvear 850 (Sanatorio de Niños), Belgrano al 600 (Complejo Deportivo Municipal), Dorrego 1600 (Sanatorio Plaza), Paraguay 1100 (Asociación Israelita) y San Nicolás 1400 (Club Echesortu y Plaza Buratovich), entre otras.

Por otra parte, en el ranking de accidentes por intersecciones, se ubica en primer lugar a Oroño y Segui, seguida por la histórica en referencia de accidentes: Oroño y Pellegrini.

“El dato curioso, en el top 10 de esquinas peligrosas es Maipú y Rioja, que se ubica en el tercer lugar en número de siniestros denunciados, aunque no es una novedad para quienes venimos trabajando en el tema, respecto a esquinas con semáforos”, alertó Boasso para concluir.

A continuación, un mapa de los accidentes de tránsito sin lesionados de Rosario conformado por datos oficiales y cuadros comparativos de siniestros por calles, esquinas, tipo de colisión y de vehículos.

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Por su parte, Mónica Gangemi, fundadora de la asociación Compromiso Vial por Úrsula y Carla (madre de Úrsula Notz, quien perdió la vida en un accidente de tránsito), manifestó a Conclusión que si bien en la ciudad los controles se mantienen desde la última gestión, “siguen siendo escasos y pobres”.

“Los controles se hacen jueves, viernes y sábados por la noche, después el resto del día y durante las noches de los demás días, poco y nada”, dijo indignada. Y haciendo una comparación a los aumentos que se están viviendo en estos meses respecto a los impuestos e insumos espetó: “Así como incrementaron todo un 500 por ciento, deberían incrementar un 500 por ciento los controles”. Además, consideró que “deben ser móviles y no en puntos fijos” y hacerse “en toda la ciudad”.

Finalmente, sobre el incremento de demandas que hubo durante el pasado mes reflexionó que podría deberse, en parte, a que “se reactivan las actividades en la ciudad después de las vacaciones y el mal clima de estas últimas semanas”.