Debido a la bajante histórica del río Paraná, que demanda tareas permanentes para sostener la operatividad de las tomas de agua, la empresa Aguas Santafesinas adquirió un equipo de buceo de última generación, destinado a esas tareas.

Si bien hoy la demanda de trabajo está focalizada en las tomas de las plantas, el equipamiento se usará en todas las tareas de mantenimiento subacuático que demanda ASSA, incluyendo cisternas, decantadores, tanques e intervenciones en la vía pública.

Según informaron desde la empresa, cuentan entre su personal con dos buzos habilitados que son quienes realizan las tareas de mantenimiento y reparación bajo agua de quince ciudades y en los seis sistemas de acueductos que forman parte del área de servicio de ASSA.

Actualmente, los buzos están abocados al mantenimiento de las tomas de agua de las plantas potabilizadoras ubicadas sobre el curso del río Paraná o sus afluentes, afectadas por la histórica bajante que provoca obstrucciones en las rejas por donde ingresa el agua, por la presencia de vegetales, principalmente camalotes. Diariamente los buzos retiran troncos, camalotes y otros residuos que navegan cerca de las tomas y pueden obstruirlas.

También realizan tareas de limpieza directa sobre las rejas de retención sumergidas de las tomas, para lo que es necesario detener el bombeo de captación de agua.

La adquisición pudo hacerse con una inversión de 5 millones de pesos realizada por el Gobierno santafesino, y que permitió comprar el «más moderno equipo existente en el mercado internacional, para optimizar y tornar más seguro el trabajo de los buzos». Es un equipo de origen estadounidense que permite se sumerjan al mismo tiempo y puedan comunicarse entre si mientras lo hacen.

«Se trata de un casco Kirby Morgan -empresa californiana con más de 50 años de trayectoria- modelo KM97 con su correspondiente panel de control y todas las piezas accesorias de inmersión. El casco de acero inoxidable es el más moderno del mercado y se ajusta a las máximas normas internacionales de seguridad», detallaron desde ASSA.

La adquisición incluye, además del casco, tubos de oxígeno auxiliares, consola para la intercomunicación entre buzos con monitoreo de consumo de aire y profundidad, botas especiales y conducto umbilical normalizado.