Aguas Santafesinas incorporó una nueva bomba centrífuga en su planta potabilizadora Rosario con el objetivo de compensar la pérdida de rendimiento de los equipos existentes por la extraordinaria bajante que está registrando el río Paraná.

Los trabajos se completaron sobre un pontón flotante ubicado en el establecimiento de French y Echeverría, donde se produce el agua potable para más de un 1.200.000 vecinas y vecinos de Rosario, Villa Gobernador Gálvez y Funes.

La nueva bomba fue transportada desde Granadero Baigorria por vía fluvial a bordo de una balsa provista de grúa.

Ya en funcionamiento, permite sumar más de un millón de litros de agua del río por hora al proceso de potabilización, compensando las pérdidas de rendimiento de otros equipos a raíz de la gran bajante.

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Estos trabajos se concretan en el marco de la emergencia hídrica vigente, que demandó hasta el momento una inversión cercana a los 500 millones de pesos por parte del Gobierno provincial, a través del Ministerio de Infraestructura.

El presidente de Aguas Santafesinas, Hugo Morzan, destacó que “hasta ahora las acciones desarrolladas con el aporte de la Provincia nos permiten mantener los volúmenes necesarios de captación en las siete plantas potabilizadoras que tenemos a lo largo del río Paraná, desde Reconquista hasta Rosario. Podemos seguir abasteciendo a 1.800.000 vecinas y vecinos, pero el desafío mayor se planteará en las próximas semanas, cuando se acentúe la bajante y comencemos a ingresar en la temporada de mayores temperaturas y posiblemente de más consumo de agua”.

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“Por eso –remarcó-, apelamos una vez más a nuestros usuarios para que adopten conductas positivas de consumo solidario y responsable del agua potable y así el servicio seguirá siendo sostenible en estas dificilísimas circunstancias”.

Bajante histórica

El río Paraná atraviesa una de las mayores bajantes desde que se tenga conocimiento, debido a la falta de lluvias y a los excesivos desmontes en la zona.

Y los pronósticos no son optimistas. Es que desde el Instituto Nacional del Agua señalaron que la situación se agravará en las próximas dos o tres semanas.

«De aquí a dos o tres semanas esperamos que la bajante se acentúe, con un descenso medio más marcado. Eso nos pondrá en una situación un poco peor», añadió el subgerente de Sistemas de Información y Alertas Hidrológicas del (INA), Juan Borús.

El funcionario indicó que la situación aún es más leve que la de la bajante histórica de 1944, pero con un nivel levemente superior y no se sabe lo que pasará en los últimos meses del año, ya que no hay certidumbre sobre lo que pueda ocurrir con las lluvias.