El secretario de Control y Convivencia Ciudadana de la Municipalidad de Rosario, Gustavo Zignago, confirmó que entre el viernes a la noche y la madrugada de este domingo se efectuaron 23 traslados al corralón por alcoholemia positiva, en el marco de más de 200 intervenciones vehiculares nocturnas que dejaron como saldo un total de 50 remisiones. “De esta cifra, tenemos 23 casos en los que los conductores registraron en sus sistemas sanguíneos porcentajes de alcohol prohibidos para manejar”, explicó el funcionario.

Según confirmó, anteanoche se remitieron 24 autos al depósito municipal por irregularidades en los elementos de seguridad, documentación y estacionamiento indebido. Uno de ellos fue por alcoholemia positiva. En este caso, el conductor infractor tenía 0,62 gramos de alcohol en sangre.

En tanto, durante el viernes a la noche y el sábado a la madrugada, fueron 26 las remisiones vehiculares: ­24 autos y 2 motos. De esa cantidad de traslados, 22 fueron por alcohol. El nivel más elevado encontrado fue de 1,88 gramos.

“Mantenemos con firmeza nuestra presencia como Estado municipal durante las noches de los fines de semana a fin de promover condiciones seguras de circulación”, destacó Zignago. “Nuestra intención es que todos los ciudadanos puedan desplazarse y usar el espacio público de manera tranquila y respetuosa de los derechos de todos. Para ello debemos garantizar el cumplimiento de la norma, más aún en lo que refiere a la conducción peligrosa”, agregó.

Los procedimientos nocturnos fueron desarrollados por personal de la secretaría de Control y Convivencia Ciudadana y efectivos de la Unidad Regional II de la Policía de Santa Fe. En tanto, este domingo a la mañana, fue detectado un caso positivo de alcoholemia de parte de un conductor que chocó a un vehículo que estaba detenido, en la zona sur de Rosario.

Chocó y se comprobó que había tomado alcohol

Un accidente de tránsito tuvo lugar este domingo a las 10.40, en 27 de Febrero y bulevar Oroño. Un auto embistió a otro que estaba detenido a la espera del semáforo. La situación alertó a personal municipal que intervino en el hecho.

Afortunadamente, ninguno de los conductores resultó herido de gravedad. Sin embargo, los agentes detectaron una actitud extraña de parte del conductor que había impactado con su coche al otro vehículo. Se le practicó el test de alcoholemia y arrojó un resultado positivo: tenía un nivel de 1,08 gramos en sangre.

Ante esta confirmación, se procedió a remitir el vehículo al corralón municipal.