Las intensas lluvias que se registraron en Rosario y la región durante los últimos días nutrieron el caudal del arroyo Saladillo y los vecinos de la zona temen que la fuerza del agua genere derrumbes o daños en el puente Molino Blanco, que une a Rosario con Villa Gobernador Gálvez.

Los vecinos denunciaron que la situación se agravó ante la paralización –por deudas con el Gobierno nacional– de la obra que se realizaba en la cascada del Saladillo, la cual preveía el reacondicionamiento del puente. Ahora, temen que el puente ubicado en el sur rosarino sufra daños por la fuerza y el caudal de la corriente.

En este sentido, el titular de Defensa Civil de Rosario, Gonzalo Ratner, advirtió: “Las lluvias en la región han sido importantes y duplicaron los promedios mensuales en una semana. Estamos muy atentos a lo que suceda con nuestros arroyos, y los monitoreamos permanentemente. Hasta el momento no dan señales de alerta, pero entendemos que la inestabilidad continua durante el fin de semana y en las próximas horas el agua de los campos va a estar llegando a esta zona”.

“El monitoreo va a ser permanente. Hasta el momento no hay señales que indiquen de un desborde de los arroyos y canales que circundan a la ciudad, pero estamos atentos a las escalas y con un recorrido permanente”, añadió Ratner.

También creció el arroyo Frías en Pueblo Esther

Las precipitaciones registradas durante la mañana y la tarde de este viernes aumentaron el nivel del arroyo Frías, en Pueblo Esther, por lo que se activó el protocolo de emergencia y se cortó la Ruta Provincial Nº 16 a la altura del puente que cruza por el arroyo. 

Además, el equipo de Protección Civil de esta localidad trabaja en las zonas de riesgo para reducir los daños.

En este sentido, se pidió que los vecinos que viven a la vera del arroyo “estén atentos” a los niveles del mismo.