El hijo de un taxista detenido y acusado de formar parte de un robo a mano armada en una casa el martes pasado realizó una denuncia pública y se manifestó este jueves frente al Centro de Justicia Penal. El joven y su familia asegura que se está cometiendo una “injusticia” contra un “laburante”. Desde Fiscalía, sin embargo, afirmaron que existen indicios suficientes para sostener su prisión preventiva.

Según contó Lucas, «el 10 de mayo su padre comenzó la jornada de trabajo a las 7:45 hs en Montevideo al 2800, en la revisión técnica, para la que había sacado un turno con anticipación. Salió de ahí con un viaje de (la aplicación) Movitaxi y fue hasta esa zona. Dejó al pasajero y a dos cuadras le hicieron señas dos hombres. Esos eran los dos asaltantes con los que luego lo relacionarían.

“Mi papá no conocía a los delincuentes; este fue un hecho azaroso que le pudo pasar a cualquiera y así lo demuestra la geocodificación – puesta a disposición por el dueño del taxi – que estuvo en manos del fiscal, pero éste hizo caso omiso del ello en la audiencia. Allí tampoco presentó los resultados del allanamiento a mi casa, porque no encontró nada”, señaló el joven.

En ese marco, el abogado del propietario del taxi, Martin Gussoni manifestó que, además de la detención del taxista, tienen retenido el auto “sin ninguna razón” ya que le entregaron al fiscal todos los datos.

“Le ofrecimos la radio para peritar y que nos devuelvan el auto”, destacó el abogado y aseguró que por este caso “hace 17 días que ni el otro chofer i el titular del auto están pudiendo trabajar”.

“Hay dos familias que no están pudiendo cobrar mientras fiscalía no nos da respuesta. Las pericias son dos, muy concretas y ya se deberían haber hecho”, remarcó.

Sobre la situación del trabajador detenido, el fiscal pidió prórroga para seguir investigando y le extendieron la prisión preventiva por 90 días.