El presidente de la Corte Suprema de Justicia de Santa Fe, Daniel Erbetta, aseguró este lunes que comprende la falta de confianza de la población en torno al Poder Judicial, debido a que éste y la política atraviesan un momento de crisis, pero pidió evitar las generalizaciones y tener en cuenta que en Rosario hubo jueces y fiscales que fueron amenazados. Además enumeró una serie de ítems que es necesario reforzar para mejorar la respuesta institucional a la problemática de violencia que atraviesa la ciudad.

«Comprendo a la gente, tiene todo el derecho a no confiar y no creer, porque hay una crisis de la política y de la Justicia, pero tiene que saber que hay mucha gente que deja el alma. En Rosario hay muchos fiscales y jueces que han sido amenazados y los palacios de justicia fueron baleados. Además suele haber tendencia a generalizar. Los poderes judiciales son muy diversos, no es lo mismo el Poder Judicial de Rosario que el de Santiago del Estero o el de Comodoro Py», planteó Erbetta este lunes tras participar del acto de conmemoración por los 211 años del primer izamiento de la bandera argentina en el Monumento.

En esa línea, el presidente de la Corte Suprema de Santa Fe indicó que tienen identificada una serie de puntos que es fundamental abordar para fortalecer la respuesta ante la problemática de violencia que atraviesa el territorio local. Incluso planteó que muchos de los crímenes que marcaron a fuego a la ciudad podrían haber sido esclarecidos si se trabajaba de otra manera.

«En ese esquema, nosotros no solo necesitamos generar protocolos de actuación y mecanismos de articulación entre las agencias, sino también un relevamiento que ya hemos hecho sobre necesidades vinculadas a insumos, tecnología y fundamentalmente capacitación de recursos humanos», identificó.

«En Rosario -detalló- tenemos un problema que no se da en la ciudad de Santa Fe. Los coordinadores de la escena del hecho en Santa Fe son todos licenciados en criminalística. En Rosario no tenemos esos recursos, y es precisamente el lugar en el que se focalizan y concentran la mayor cantidad de hechos violentos en la provincia».

Para exponer la gravedad del escenario actual, Erbetta especificó que el territorio rosarino, en lo que respecta al a tasa de homicidios, quintuplica el promedio nacional y está cuatro veces arriba de la provincia de Buenos Aires.

«Esto marca una situación de crisis y urgencia. Igual esto no es nuevo. En el año 2013 tuvimos la segunda marca récord en tasa de homicidios después de 2022. Recuerdo que entonces, en un reportaje, habíamos hecho un diagnóstico de esta situación en Rosario y habíamos planteado la necesidad de que los poderes públicos y los partidos políticos pusieran este tema por fuera de la agenda electoral; se sentaran a diseñar una política pública que superara cualquier gestión de gobierno, y no pasó», lamentó.