Hace diez años, el reconocido bar rosarino El Cairo contrató a un joven con síndrome de Down, Daniel Hernández, quien llegó al grupo de trabajo a transformar los días rutinarios con una actitud frente a la vida que lo posicionó como un compañero muy querido y respetado en el ámbito laboral.

Dany, como se lo conocía, falleció este 25 de mayo por síntomas compatibles con coronavirus, lo que dejó un profundo pesar y dolor tanto en su trabajo como en todo espacio en donde se desarrolló.

Es que Dany no solo se desempeñaba como mozo en El Cairo, sino que también era un gran artista y estudioso de la actuación y el baile.

Es profundo el dolor y el pesar que sienten todas las personas que lo conocían y lo recuerdan como un ser agradable y alegre que cambiaba los días.

Conclusión habló con Ricardo Centurión, encargado de relaciones públicas del reconocido bar, quien compartió muchas cosas con el joven que «se diferenciaba del resto por su alegría y porque quería vivir».

«Es muy duro porque, sumado a lo que le duele a uno porque se muere un compañero, un amigo, tenés también por un lado que es agradable y por otro es una carga, porque todo el mundo que lo conoció llama, escribe, manda fotos. Es una cosa tremenda lo que genero este pibe», contó Centurión.

El compañero de Dany, mencionó que «era muy particular, cariñoso, alegre, un tipo que se diferenciaba, un pibe que quería vivir. El tipo realmente estaba para adelante».

El «Negro» Centurión recordó: «Bailaba folklore, bailaba cumbia, fue aprender, hacia teatro. Era un chico muy divertido. Enseguida se levantaba y animaba el momento. Era muy inteligente. El entendía la ironía. Con el tema del futbol cuando lo cargaban les decía que no molesten porque él venía a trabajar. Un verdadero personaje», agregó su colega.

El recuerdo de sus compañeros es muy vívido y profundo. Desde el local gastronómico agregaron que esta situación fue «una cosa inesperada».

Y concluyó: «Era un personaje, muy enamoradizo, todo el mundo lo quería. Fue tremendo para nosotros. Las ganas de vivir que tenía era increíble. Ya estaba organizando el cumpleaños que era en septiembre. Todavía no lo podemos creer».