Desde el viernes  y hasta hoy domingo se concretaron unos 250 controles a autos y motos, de los cuales 36 fueron sancionados por alcoholemia positiva. El nivel de alcohol en sangre más alto encontrado fue de 2,16 gramos. “Seguimos manteniendo una presencia fuerte durante los horarios de entretenimiento a fin de garantizar el cumplimiento de las normas y en consecuencia, convivencia en la ciudad”, sostuvo Pablo Seghezzo, secretario de Control y Convivencia Ciudadana.

La Secretaría de Control y Convivencia Ciudadana procedió a la remisión de 62 vehículos al corralón este fin de semana. Los traslados tuvieron lugar en el marco de los operativos vehiculares llevados adelante en horarios nocturnos, entre el viernes y este domingo. Las acciones estuvieron a cargo de personal municipal en colaboración con efectivos de la Unidad Regional II de la Policía de Santa Fe.

“Reforzamos las intervenciones en estas jornadas en las que la mayoría de los ciudadanos salen y disfrutan de las ofertas de entretenimiento, con el objetivo de hacer cumplir las normas que regulan el tránsito y el uso debido de los espacios públicos”, sostuvo el secretario Pablo Seghezzo.

El funcionario confirmó que entre el jueves a la noche y la madrugada de este domingo, unos 62 autos y motos fueron remitidos al depósito municipal por diversas faltas. De este total, 36 unidades fueron trasladadas luego de que sus conductores dieran positivo en los controles de alcoholemia realizados. “El resto de los vehículos fueron sancionados por falta de documentación reglamentaria para circular y en 3 oportunidades por negarse a ser controlados por personal municipal y policial”, explicó.

De acuerdo a los datos oficiales, entre el jueves y el viernes se remitieron 15 vehículos al corralón, 6 por alcoholemia (0,99 el nivel más alto hallado). En tanto, la noche posterior, el saldo fue de 22 traslados –17 por ingerir alcohol (1,87 gramos el más alto)– y finalmente durante la noche del sábado y la madrugada de hoy, 20 autos y 5 motos terminaron en el depósito, 13 de ellos por alcoholemia, siendo de 2,16 el índice de alcohol en sangre más alto que se registró.

Seghezzo brindó una evaluación al respecto: “El consumo de alcohol previo a la conducción continúa siendo una práctica en la que muchos incurren, más allá de los avances en la concientización, en la educación y en el refuerzo de los controles vehiculares”, indicó. “Ante este panorama redoblamos nuestros esfuerzos y con ellos minimizamos a cero nuestra tolerancia a esta forma incorrecta de conducción y de uso de los espacios comunes”, continuó.

“Vamos, junto a gran parte de la población que nos apoya y acompaña en esta lucha, a mantenernos en las calles para prevenir, para detectar y sancionar a quienes infrinjan las normas. Nuestro objetivo es tan claro como conocido, queremos erradicar el alcohol del volante y trabajamos para ello”, apuntó.