Por Graciana Petrone

“Humor y Filosofía” (CR Ediciones 2023) es el título del flamante libro que la actriz Liliana Gioia presentará el próximo miércoles 23 de agosto a las 18.30 en la Biblioteca Argentina, de Presidente Roca y Córdoba acompañada por el reconocido académico Fernando Avendaño. Se trata de una obra de análisis sobre la comicidad, del “por qué y el para qué” de la risa y cómo estos conceptos fueron desarrollados por pensadores como Sigmund Freud en “El chiste y su relación con el inconsciente” y Henri Bergson en “La risa”, a los que la autora presenta en las páginas preliminares como “textos canónicos”.

Gilles Lipovetsky, más cercano a la llamada posmodernidad, es otro de los autores que Gioia aborda en el libro, sin omitir otros clásicos como Luiggi Pirandello, entre otros.

El trabajo surgió de los interrogantes “¿Por qué nos reímos?”, “¿Para qué reir?”. Así, Gioia unió la problemática del saber con su extensa trayectoria en los escenarios y lo vinculado con el ámbito teatral como la dramaturgia y la docencia.

El libro se presenta entonces como un meticuloso trabajo de análisis que fluctúa entre lo ontológico y lo empírico, es decir, entre lo filosófico que estudia lo que “hace que las cosas sean lo que son”, unido a los métodos basados en la experiencia y la observación sistemática sobre la pulsión del actor, la creación, el modo de presentar un acto que provoque risa y la reacción del público mismo ante esa acción.

Gioia contó que siempre se sintió cómoda en la comedia. De hecho, dijo que, sin proponérselo, siempre tuvo ciertos rasgos de comicidad, lo que la llevó a indagar acerca de los procedimientos.

Los pensadores que aborda en “Humor y Filosofía” fueron llegando a la vida de la autora en distintos momentos. “Pirandello, como gran autor del grotesco, que yo había estudiado mucho. El grotesco es la simultaneidad de lo trágico y lo cómico”. En tanto a Freud, si bien lo había leído, sin ser psicóloga, Gioia dijo que él escribía con mucha necesidad de ser entendido. “En una época –agregó– en donde cuestiones como la sexualidad y la sexualidad infantil, eran tan calladas y resultaron tan cuestionadas por el establishment”.

A Freud lo descubrió hace casi 23 años, mientras que a través de Henri Bergson se conectó con aún más con Molière, “con la gran dramaturgia universal que Bergson estudió mucho y con la construcción del humor en estos autores”.

Tanto en el humor como en el drama

Al ser consultada sobre si es más difícil hacer reir o llorar al público, dijo: “Creo que las dos cosas bien hechas son difíciles. Todo implica un alto grado de compromiso emocional. En el humor hay seriedad, hay un compromiso con el aquí y ahora, si yo me caigo, para el que se cae es un tormento caerse. Las dos cosas son motivo de estudio, las dos cosas se pueden lograr si uno se entrega y si tiene el deseo”.

“Yo he hecho drama en mi carrera actoral, pero no me hace tanto bien hacerlo, me hace mucho mejor la comedia, quizás porque, como dice Freud, cuando uno se ríe se interrumpe el sufrimiento. Yo me estoy riendo de algo y ese sufrimiento, esa situación dolorosa se interrumpe. Si bien no se interrumpe la realidad, porque sé que hay alguien que va a ser operado o que alguien que se está por morir, cuando se produce el humor acerca de esa situación, o cuando en medio de la adversidad me río, se interrumpe el sufrimiento”.

Fernando Avendaño y Marcelo Kartun

En la contratapa del libro rezan dos escritos breves, pero no menos contundentes, de Fernando Avendaño y Marcelo kartun sobre la obra de Gioia.

Avendaño, destacado académico y director de carreras de posgrado universitarias, acompañará a la autora en la presentación del libro este miércoles 23 y escribió en la contratapa: “Después de leer la obra de Liliana he quedado convencido de que la selección natural ha preservado el humor durante tantos milenios para ayudarnos a sobrevivir (…)”.

En tanto Kartun, destacado dramaturgo y director argentino que ha cosechado numerosos premios a lo largo de su carrera cita a Gilles Deleuze en una frase sobre sobre Nietzsche (autor, entre otros, de “El origen de la tragedia”) que dice: “Quienes lean a Nietzsche sin reírse mucho y con frecuencia, sin sufrir de vez en cuando un ataque de risa, es como si no lo hubiesen leído (…) y cierra: “Hay risa en la filosofía y hay filosofía en la risa. Profundo y jocundo, este libro de Liliana Gioia es ejemplo perfecto”.