El próximo viernes 2 de junio se conocerá el veredicto del juicio por la muerte de Carlos “Bocacha” Orellano, el joven de 23 años que fue hallado muerto en las aguas del río Paraná en febrero de 2020, luego de ser retirado del boliche Ming River House, al que había concurrido con amigos, por guardias de seguridad.
El juicio oral comenzó el pasado miércoles 12 de abril y tiene a dos policías de la fuerza santafesina y a dos exempleados de seguridad del boliche bailable en el banquillo de los acusados, a quienes se les achaca el delito de homicidio.
El próximo miércoles 31 de mayo comenzará la etapa de alegatos –que iniciará a las 8 de la mañana, en el Centro de Justicia Penal–, mientras que el jueves 1 de junio será el tiempo de réplicas y debate, y el viernes 2 será la lectura del veredicto.
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Desde la Asociación Civil Bocacha Orellano –creada por familiares y amigos de la víctima– advirtieron que en el proceso judicial se “logró reconstuir a través de testimonios y pruebas científicas, la historia y el acercamiento a la verdad sobre el asesinato de Bocacha”.
“Los médicos forenses terminaron de confirmar que minutos previos a su muerte, fue salvajemente golpeado. Las infiltraciones hemáticas por todo el cuerpo dieron cuenta del grado de violencia con el cual lo atacaron y redujeron”, agregó la organización.
Y concluyó: “Ni la impunidad, ni el cinismo con el que los imputados mantuvieron su pacto de silencio estos últimos tres años frenó ni hizo claudicar nuestra búsqueda de Verdad y Justicia, y hacia allí vamos. La sentencia debería acercarnos un poco más a la reparación que debe existir por parte del sistema Judicial. No es sólo para nosotros. Es un deber hacia la sociedad”.
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Los cuatro imputados enfrentan cargos por los delitos de “homicidio simple con dolo eventual en grado de coautores”, en tanto que a los dos policías se les suma el delito de “incumplimiento de deberes de funcionario público y falsedad ideológica”. Todos se encuentran con prisión preventiva y enfrentan pedidos de pena de entre 17 y 19 años de cárcel por esos delitos.
Se trata de los empleados de seguridad privada del boliche Ming River House, Fabián Claudio M. (54) y Emiliano L. (32), y de la pareja de policías provinciales, Karina G. (43) y Gabriel N. (40).
